El comienzo de junio ha traído consigo un sorprendente reencuentro para el mundo del corazón, que ya ha acarreado a lo largo de los años varios procesos judiciales.

Tras siete años sin verse, Ivonne Reyes y Pepe Navarro coinciden en los Juzgados de Violencia de Género con motivo de la denuncia que la actriz interpuso contra el padre de su hijo por acoso y amenazas. 

Primero llegó la venezolana, que, ocultando su rostro nervioso con mascarilla y gafas de sol, se paró con la prensa para ofrecer declaraciones sobre cómo se siente: "Por fin me pueden escuchar después de poner 30 denuncias. Y sí, sigo teniendo miedo". 

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Seguidamente, apareció el presentador, con una actitud completamente diferente a la de ella. "Aquí está el circo, lo que le gusta a esta chica", comentó a los medios con tono irónico. 

Tras dos horas declarando ante el juez, en las que cada uno ofreció su versión, el periodista salió satisfecho del tribunal, asegurando que han pedido su absolución tras considerar que no se ha cometido ningún delito.

"Yo lo que quiero es la paz, venir a un juzgado no le gusta a nadie y vivir de esa manera es una forma de vida que ha elegido ella, pero no le favorece, ni tampoco a su entorno y naturalmente, ni a mí, ni a nadie absolutamente", concluyó ante los micrófonos. 

Aunque el jurado le haya dado la razón a la otra parte, la empresaria salió con una sensación de alivio: "Estoy muy orgullosa de haber llegado hasta aquí, no sé qué pasará mañana, pero para mí es un gran paso el sentirme escuchada". 

INSTAGRAM

Asimismo, Reyes le ha lanzado a Navarro un dardo envenenado a través de una historia de Instagram, a raíz de las palabras que dijo él antes de declarar: "El circo continuará (mientras haya quien aplauda a los payasos)"