Era un silencio constante, perenne, que daba lugar a todo tipo de habladurías: desde sus problemas de salud que empezasen en África el año pasado a una clínica de rehabilitación en Suiza o la más que posible ruptura de su matrimonio con el príncipe Alberto de Mónaco. Pero ha decidido ponerle fin y Charlène de Mónaco ha hablado alto y claro sobre estos últimos meses con la prensa creyendo saber de su vida más que ella misma.

Para empezar, se ha mostrado bastante contundente. Lo ha hecho durante la noche de los Monte Carlo Fashion Awards, cita a la que acudió acompañada de su hija Gabriella, que debutaba en un evento de este calibre. Y allí ha aprovechado para hablar con Monaco Matin, donde ha concedido una pequeña entrevista.

Ya en su primera respuesta ha dejado claro que no está del todo recuperada. "Aún estoy frágil y no quiero apresurarme", ha señalado la princesa, así como mira con esperanza el futuro porque "el camino ha sido largo, duro y lleno de dolor" desde que contrajese una infección otorrinolaringológica en su viaje a Sudáfrica hace prácticamente un año y que acabó obligándola a pasar casi 2021 al completo lejos de su familia.

Tiempo, por supuesto, que dio pie a multitud de teorías que ella ha escuchado con resignación y pena y para las que tiene una simple contestación. "¿Qué quieres, hablar de los rumores de divorcio o de mi nueva casa en Suiza?", ha lanzado, desafiante y muy molesta, la princesa, quien ha buscado así zanjar cualquier polémica y tildarlas de lo que son: "Me parece lamentable que todavía haya ciertos medios que lancen este tipo de rumores sobre mi vida y mi relación".

"Como el resto de personas, nosotros también somos seres humanos, y como tales tenemos emociones y debilidades. Pero solo nuestra familia es la que está expuesta a los medios de comunicación, donde la más mínima debilidad está expuesta", ha añadido. También ha querido dejar claro el papel de su marido: "Alberto ha sido un enorme apoyo. Juntos hemos hablado sobre estos rumores y él ha hecho todo lo posible por protegernos a nuestros hijos y a mí".

Además, ha explicado que se siente "más serena" y que le ayudó a mejorar "centrar todas sus energías" en su familia y su salud porque esas eran "las prioridades". "Estoy muy feliz de haber regresado a Mónaco con mi familia. He recibido cientos de mensajes muy cálidos de ánimo cuando estaba lejos y agradezco el apoyo", ha finalizado.