La batalla de Azovsral, una de las más sangrientas desde que comenzará la invasión de Rusia a Ucrania, está dejando muchos heridos y muertos. La pasada noche, salieron de la planta cinco autobuses con 53 soldados ucranianos gravemente heridos, muchos de ellos con amputaciones, a un centro médico en Novoazovsk.
Los supervivientes, que resistieron atrincherados, ahora han viajado custodiados por los mismos que llevan semanas asediándoles.
En la planta todavía quedan 400 soldados atrapados y la prioridad de ucrania es salvar sus vidas.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, celebra esta evacuación halagando y apoyando el trabajo de sus soldados: "Ucrania necesita a sus héroes vivos".
Otras 211 personas fueron llevadas a Olenivka, territorio controlado también por Rusia, a través del corredor humanitario, agregó el Ministerio en un comunicado.
Desde el Kremlin ya negocian para intercambiar a los heridos por prisioneros rusos.
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