Adrián es uno de los nuevos concursantes que participarán en la décima edición de MasterChef, que ha comenzado el 18 de abril en La 1 de TVE, por lo que se pondrá el delantal y competirá con otros 15 aspirantes.

Este chico de 28 años es de Bilbao y trabaja como instalador de aire acondicionado. Su vida no ha sido sencilla, ya que vive en un barrio conflictivo, lo que sumado a la muerte de su padre en un accidente de moto cuando él era muy joven, le hicieron desestabilizarse y participar en peleas, como indican desde RTVE. 

Como consecuencia de todo esto, tuvo problemas con la justicia, por lo que ahora el programa le brinda una nueva oportunidad, importante para él, para seguir un nuevo camino en la vida. 

De hecho, tiene como gran referente a su propia madre, que es cocinera profesional, por lo que también quiere que esta se sienta orgullosa de él. Es ella quien le ha enseñado todo lo que sabe sobre cocina, aunque tiene otra gran afición: el flamenco y la guitarra.

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