La relación de Rosalía y Rauw Alejandro parece que va viento en popa, y buena prueba de ellos es que ya se han comprado una propiedad en común. La Casa Morera de Manresa es uno de los nombres que recibe este lujoso palacete que los cantantes han comprado y quieren reformar.
Tal y como compartió recientemente el diario catalán Regio7, han encargado el proyecto de obra para esta gran vivienda. Aun así, han de tener en cuenta que esta finca está protegida, pues se trata un Bien Cultural de Interés Local, por lo que los cambios que se le vayan a realizar serán bajo supervisión.
Según ha informado Vanitatis, la compra tuvo lugar el pasado 11 de enero y, hasta entonces, la vivienda estuvo ofertada durante más de un año por unos dos millones de euros para "inversión hotelera o para eventos", algo que parece que finalmente no será así.
Construida en 1905 y diseñada por el Ignasi Oms y Ponsa, esta vivienda de 2.624 metros cuadrados tiene vistas a la montaña Montserrat y está rodeada de 30 hectáreas de campos de cultivo.
La finca tiene, además de la gran casa modernista de tres cuerpos en forma de U, una cuadra de caballos y otras 4 viviendas completas más entre las que se incluyen una de 130 metros cuadrados con cocina, vestidor y almacén junto a la piscina.
Vidrieras, bóvedas, chimeneas de época, jacuzzi y varias amplias terrazas son parte de los grandes lujos de los que dispone el palacete principal. Ocho suites, una cocina totalmente reformada, dos grandes salones o una bodega son algunas de las habitaciones de las que dispone la Casa Morera, también conocida como Masía Morera o Mas Morera.
Los vecinos de la zona aseguraron a Regio7 que han visto recientemente mucho movimiento de coches, incluidos camiones de mudanza. Sin embargo, la visita de Rosalía y Rauw Alejandro a la finca habría sido bajo la mayor discreción, y ha sido Pilar Tobella, madre de la artista, quien ha acudido en más ocasiones para supervisarlo todo.
Hasta ahora, el propietario de la casa que figuraba en el Registro de la Propiedad era Jean Claude Gaston Magnien, que lo habría heredado de su fallecida mujer, pero originalmente la masía perteneció a los padres dominicos del convento de Sant Domènec de Manresa, hasta que se vendió a particulares y, durante décadas, fue propiedad de la familia dueña de la zapatería Torra de Manresa.
Pero ahora, la pareja de artistas son los nuevos dueños de Mas Morera, nidito de amor al que seguro que acudirán cuando la catalana vaya a visitar a su familia, pues su residencia habitual está en Nueva York.
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