Un optimismo cauto reina entre las expectativas de los ciudadanos de la CoFoE

La Conferencia sobre el Futuro de Europa (CoFoE) cerró su tercer panel, celebrado en Varsovia, envuelta en un ambiente de optimismo cauto entre los ciudadanos, que esperan que sus voces se escuchen entre las paredes de las instituciones de la Unión Europea (UE) y que sus recomendaciones se materialicen en políticas.

Es una cuestión que "ha salido a debate", según explicó Sofía Palacios, una joven zaragozana que participó en este panel de la Conferencia sobre medio ambiente y salud.

"Hay gente que cree que las recomendaciones se van a plasmar en papel", apuntó, pero también hay quienes "creen que este proceso va a quedar en papel mojado". No obstante, subrayó que los grupos trabajaron "con una actitud positiva" para poner sobre la mesa ideas que ven en su día a día y que pueden ayudar a los ciudadanos.

Por su parte, el eurodiputado belga Guy Verhofstadt (Renew Europe), representante de la Eurocámara en la presidencia conjunta de la Conferencia -junto a la Comisión Europea y el Consejo Europeo-, no oculta el optimismo.

"Lo que hace único este ejercicio es la participación del principio al final", defendió Verhofstadt en un encuentro con periodistas este sábado, donde afirmó que, aunque este despliegue "crea altas expectativas" a los ciudadanos, "también ejerce presión política" a las instituciones para no ignorarlos.

Verhofstadt sostuvo también que los ciudadanos "quieren hacer este ejercicio extensivo", algo que confirma Marieta Liñeira, una joven gallega que participa en la Conferencia y que asegura que, en su grupo de trabajo, una de las propuestas con más consenso era "volver a repetir" un proceso como este: "Si ya lo han hecho una vez, por qué no lo van a hacer más", dijo.

Liñeira se encuentra entre las optimistas y consideró que, aunque en cuestiones "del tipo económico" haya desacuerdos, otras medidas relacionadas con la salud mental sí pueden salir adelante.

En todo caso, los ciudadanos coinciden en que hay "muy buenos consensos", tal como resumió su compañero Jesús Benito, también esperanzado en que los políticos superen las "limitaciones de sus países" y los escuchen.

Esfuerzo económico y humano

Entre los ciudadanos, hay una esperanza generalizada de que este esfuerzo -económico y humano- llegue a algún punto, pero también hay escépticos como Jesús Teruel, que, además de participar en los paneles, es "embajador" en el pleno de la Conferencia, donde los representantes de los ciudadanos se encuentran con los representantes políticos.

Teruel cree que estos "no están por la labor", que solo "miran a corto plazo y que no les muevan el sillón", mientras que los ciudadanos quieren "ir sentando las bases" para el futuro.

Los hay también que, como Juan Racionero, si bien no confían en que se hagan políticas con sus propuestas, creen que la CoFoE "acerca las instituciones a la ciudadanía" y que es ahí "donde radica el éxito".

¿Saldrá el debate de la burbuja?

Uno de los objetivos de esta Conferencia es seleccionar a ciudadanos aleatorios para sacar el debate de la denominada "burbuja europea" y llegar a más gente, aunque la percepción de los participantes dista de ello.

Para Verhofstadt, sin embargo, el objetivo no es conseguir "usuarios únicos" en la plataforma multimedia habilitada para que cualquier ciudadano pueda ingresar sus propuestas, sino el ejercicio deliberativo en sí, y dijo que la CoFoE "no es un instrumento de propaganda".

No obstante, superado el ecuador de la Conferencia, "lo que más abunda es una ilusión por el proceso" y la percepción de que "la UE está dando un paso en la profundización de la democracia", según asegura Javier Fernández, uno de los facilitadores que acompaña a los ciudadanos para garantizar que tengan debates fructíferos.

De hecho, ciudadanos como José Ignacio Santiago lo ven como "una experiencia única para hacer propuestas" y otros, como Raquel Tapia, creen que "cualquier aportación, aunque sea mínima, siempre vale la pena". "En eso estamos, en mejorar la Unión en la Unión Europea", concluyó Jesús Gijón.