Gaspar ha explicado que la séptima ola de la COVID-19, la falta de profesionales sanitarios y las graves deficiencias del transporte sanitario "ha formado un cóctel que está poniendo la atención sanitaria en Aragón en grave riesgo".

"Por culpa de la mala gestión del Departamento de Sanidad, los vecinos de Huesca y el Bajo Aragón se han quedado sin servicio de UVI móvil en su territorio", ha lamentado Gaspar, quien ha presentado una pregunta para que el Gobierno de Aragón explique qué medidas piensa tomar al respecto.

"En Alcañiz, el Departamento de Sanidad ha sido incapaz de asignar un médico al servicio UVI móvil del fin de semana, pasando a ser cubierto el puesto por un técnico en emergencias sanitarias, quedando el servicio incapacitado para realizar sus funciones y convirtiéndose el vehículo en uno de soporte vital avanzando", ha manifestado Gaspar, quien ha recordado que esta circunstancia impide prestar el servicio adecuado a la población.

Por otra parte, en Huesca, el servicio de UVI móvil, compuesto por dos vehículos, también se ha visto afectado y seriamente comprometido al no ser capaz el Departamento de Sanidad de cubrir las necesidades del mismo.

"Uno de los médicos que cubre el servicio de UVI móvil en Huesca ha resultado positivo en COVID-19, y el Departamento de Sanidad ni ha cubierto ni tiene intención de cubrir la baja con otro médico, ocurriendo exactamente igual que en el servicio de UVI móvil de Alcañiz, en el que el vehículo pasa a llevar a cabo tareas de soporte vital básico, y no de UVI", ha subrayado.