El precio de la luz sigue batiendo todos los récords en el mercado mayorista, donde ya ha superado la barrera de los 300 euros por megavatio/hora. El encarecimiento se nota en los hogares, las empresas y también en los servicios públicos, de manera muy especial en los que dependen de la electricidad. Es el caso de Metro de Madrid. Antes de la escalada de precios, la factura de la luz del suburbano se situaba en 120.000 euros  y ahora supera los 260.000.

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Son datos del consejero de Transportes e Infraestructuras, David Pérez, que este jueves solicitó ayudas públicas al Gobierno central para hacer frente al pago de este suministro. El responsable autonómico cifró en 30 millones de euros el sobrecoste que tendrá que afrontar este ejercicio la Comunidad de Madrid para pagar las facturas del suburbano. 

"No hay empresa que pueda asumir una desviación presupuestaria tan grande", aseguró Pérez. Hace algunos meses que el responsable autonómico ya advirtió de las consecuencias que tendría para las arcas públicas la escalada de precios, pero al no revertirse esta con el paso de los meses ha vuelto a poner de manifiesto la situación.

"Queremos pedir al Gobierno nacional un apoyo en modo de ayudas para el mantenimiento del transporte público", recalcó el consejero este jueves desde la Asamblea regional. "No solo para Metro de Madrid, sino para todos los servicios de suburbano de España", agregó, advirtiendo que la situación por la que pasa el suburbano madrileño es similar a la que tienen que enfrentar los medios de transporte de otras comunidades.

Esta ayuda, insistió Pérez, sería fundamental para que el sobrecoste que se tiene que asumir por el precio de la luz no acabe afectando al servicio público que se presta.