Condenado un albañil por abusar de una menor en la casa a la que fue a arreglar una chimenea

  • Pasará seis años y tres meses en prisión, más cinco de libertad vigilada y una orden de alejamiento de 200 metros.
Palacio de Justicia de Murcia
Palacio de Justicia de Murcia
EUROPA PRESS
Palacio de Justicia de Murcia

Un hombre de 51 años ha sido condenado en Murcia a seis años y tres meses de prisión por abusar sexualmente de una menor, a cuya casa había acudido, en su condición de albañil, para arreglar una chimenea.

Tal y como recoge el diario La Opinión de Murcia, la sentencia de la sección tercera de la Audiencia Provincial de Murcia decreta que una vez acabada la sentencia, el hombre deberá cumplir cinco años más de libertad vigilada y no podrá acercarse a menos de 200 metros de su víctima, que ahora tiene 16 años y en el momento de los abusos tenía 14. Además, debe hacer frente a una indemnización de 5.000 euros por daños morales.

Los hechos ocurrieron cuando el condenado acudió a casa de unos amigos, padres de la víctima, a efectuar unos arreglos en la chimenea de la vivienda. Una tarde, abordó a la joven y según recoge la sentencia, "empezó a besarla en el cuello y la lanzó al sofá, colocándose encima de ella".

El acusado sometió a tocamientos a la joven, que pudo zafarse de su agresor empujándole con los pies.

Según la sentencia, esa noche el albañil envió a la joven un mensaje a través de una red social "para decirle que al día siguiente iba a ir otra vez a su casa a trabajar y que 'si estuviera con él estaría haciendo algo rico, que harían el amor y que le daban ganas de comerla todita".

La joven declaró que tenía al albañil como contacto en esa red social porque pensaba que se trataba de un chico de su edad, compañero de clase, que se llama igual que el sujeto, ya que de hecho son padre e hijo.

La víctima pidió a una amiga que se quedara a dormir con ella para no estar sola, pero cuando al día siguiente ésta se fue, de nuevo fue abordada por el agresor sexual, que la lanzó al sofá e intentó violarla. Como en la anterior ocasión, la joven pudo zafarse.

La chica no quiso denunciar por vergüenza, pero sí se lo contó a sus amigas. El rumor se fue extendiendo hasta llegar a oídos de una profesora, que habló con la chica y luego con su madre. Al conocer los hechos, la mujer denunció inmediatamente la violación.

En el juicio, el albañil negó haber abusado de la menor y según su testimonio, fue una venganza de la joven porque ésta le pidió ayuda para conocer a un chico que le gustaba y él, tras comentarlo con su hijo, le dijo que no podía hacer nada. El tribunal no creyó esta teoría.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento