Con esta nueva normativa, la voluntad del Equipo de Gobierno, ha dicho en rueda de prensa, es que "haya más terrazas, pero con control, bien planteadas". Para Cuesta las terrazas "son beneficiosas" para la ciudad, ya que contribuyen a dinamizar la actividad económica.

La pandemia del coronavirus, ha explicado el edil, ha puesto de manifiesto que las personas demandan más consumir en el exterior de los establecimientos, ya que "hay gente que sigue teniendo miedo a entrar en interiores".

Es por ello que la nueva ordenanza "tiene que ser un contrato de reciprocidad con la hostelería", mediante el cual se garantice la viabilidad de los negocios, pero con la exigencia de que la convivencia con el resto de elementos del entorno "de manera real" Se incluirá en la misma "tratamientos singulares" en determinadas zonas de la ciudad, apostando por la homogeneidad estética en puntos como el Oviedo Antiguo. Cuesta ha asegurado estar "empeñado" en este aspecto, argumentando que si se pretende que el Oviedo Antiguo sea foco de atracción turística, es necesario ofrecer "espacios más dignos que los actuales". "Los hosteleros deben entender que deben hacer un esfuerzo importante", ha apostillado.