La Policía Nacional y la Guardia Civil han puesto este año ya 299 denuncias por tráfico y consumo de drogas en las inmediaciones de colegios, institutos y centros de ocio y realizaron 347 decomisos, según los datos que presentó ayer la Delegación del Gobierno.

Desde el año 2006, cuando se puso en marcha este programa, se han efectuado 118 detenciones, cuatro de ellas en la campaña de este año, cuando ha habido 347 decomisos. De ellos, 249 se han realizado en zonas de ocio como los bares, y 55 en escolares.

En estos tres años, las fuerzas de seguridad han incautado sobre todo speed (15.241 gramos), seguida del hachís (11.093 gramos) y de éxtasis (6.251 unidades), además de marihuana (5.293 gramos) y cocaína (2.532 gramos).

"Notamos que las campañas son efectivas porque vemos que las cantidades decomisadas son insignificantes y de hecho van disminuyendo año a año", subrayó el general de la Guardia Civil, Rafael Ferrera.

La banalización de los efectos y la aceptación social del consumo de droga son dos de los grandes enemigos en materia de prevención, según los expertos.

"Los chicos empiezan antes a consumir droga; eso sí, las chicas son las que antes entran a tomarla de forma habitual", señaló el responsable del área de Salud Mental del Departamento del Salud, Mariano Sanjuán.

Los coqueteos con las drogas comienzan cada vez a edades más tempranas. Antes de los trece años los chavales empiezan a probar el tabaco y el cannabis. A continuación el consumo se deriva hacia el éxtasis y hacia los quince dan el paso a la cocaína. "Cuanto antes se inicia el consumo, más probabilidades hay de hacerse adicto", según detalló el doctor Mariano Sanjuán.

Además, los agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil realizan conferencias y reuniones con alumnos y padres para concienciarles sobre los problemas que acarrea este consumo, como psicosis, falta de memoria o cáncer.

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