Una profesora no titular de la Universidad de Granada (UGR) ha sido condenada a pagar una indemnización de 14.000 euros a un alumno al que coaccionó mediante llamadas telefónicas de naturaleza personal y mensajes vía WhatsApp durante el curso 2015/2016, según ha publicado el Ideal. 

El juicio tuvo lugar en el Juzgado de lo Penal número 6 de Granada antes del verano y acabó con una sentencia que contó con el visto bueno de la docente, que solo reconoció haber cometido un delito leve de coacciones. Por ello, además de la indemnización previa, pagará una multa de 360 euros al Estado.

El tribunal consideró que los mensaje y llamadas no tenía "finalidad académica alguna" y causaron en el estudiante "una presión consecuencia de la cual sufrió un lógico desasosiego". El alumno propio alumno reconoció haber sentido esa presión pero negó que fuera solicitudes para lograr favores sexuales.

La UGR aplicó en este caso el Protocolo para la Prevención y Respuesta ante el Acoso, un instrumento en vigor desde octubre de 2016 que tiene como objetivo "abordar el problema del acoso en todas sus expresiones y manifestaciones".