La Unión Europea tiene cosas por hacer, pero está muy fuerte. Ha salido fortalecida de la pandemia y está dispuesta a asumir el liderazgo global. Esa puede ser la principal conclusión del discurso la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en el debate sobre el estado de la Unión. "Hemos escogido avanzar juntos, como una sola Europa y podemos estar orgullosos", aseguró, en un mensaje lleno de temas: economía, clima, estado de derecho, política exterior o autonomía estratégica.

El debate del estado de la Unión, en directo:

"Al echar la vista atrás, este último año, veo un alma fuerte en lo que hacemos. Robert Schumann dijo que Europa necesitaba un alma y Europa en los últimos doce meses ha dado vida a esas palabras", comenzó diciendo Von der Leyen, que reivindicó varias veces el éxito de la vacunación como representación de lo que debe ser la Unión Europea. "Hemos escogido avanzar juntos, para compartir las vacunas o los fondos Next Generation y también lo decidimos con el Pacto Verde Europeo". Para la presidenta, se ha decidido "avanzar como una sola Europa" y por eso, dijo, "podemos estar orgullosos". Pero lanzó un aviso: "Los tiempos de coronavirus no han acabado".

Quiso resaltar la presidenta el papel de los jóvenes durante el último año, como representantes de los valores de la UE. "Nuestra juventud ha dado significado a la empatía y a la solidaridad", sostuvo, y esa debe ser la línea a seguir para que la Unión sea "más fuerte en el futuro". 

El eje principal del discurso de Von der Leyen ha sido precisamente la vacunación contra la Covid-19. "Hoy, contra todas las críticas, Europa está entre los líderes mundiales de vacunación y hemos sido los únicos que hemos compartido más de la mitad de las vacunas con el resto del mundo", sentenció, y dijo que Europa "ha cumplido" tanto con sus propios ciudadanos como "con el resto del mundo", siendo también líderes en donación de dosis. 

Pero no hay razones para la complacencia. "Nuestra prioridad, la más urgente, es acelerar la vacunación global (sobre todo en los países más pobres)", alertó Von der Leyen, y por eso comunicó la donación de otros 200 millones de dosis hasta mediados del año que viene. Los esfuerzos "tienen que mantenerse" y por eso la Comisión quiere impulsar una de las prioridades que se planteó ya el año pasado: la UE de la Salud.

"Hemos demostrado que si trabajamos juntos, actuamos con rapidez", continuó la presidenta de la Comisión, que aseguró que la UE ha aprendido "las lecciones del pasado, cuando estábamos demasiado divididos". Llamó además a no lanzar las campanas al vuelo: "Esto es solamente el principio. En el 2008 declaramos demasiado pronto la victoria y no quiero que se repita ese error".

Revisión de las gobernanza económica antes de 2023

La salida de la crisis pasa por las inversiones, y Von der Leyen recordó que con los fondos de recuperación "invertimos en el corto plazo, pero también en el largo plazo". Asimismo, la presidencia anunció la creación de una nueva misión sanitaria que invertirá 50 billones de euros para estar preparada para la próxima pandemia, siguiendo ya los pasos marcados el año pasado.

Otro de los asuntos pendientes es el de las reglas fiscales de déficit y deuda, que de momento siguen suspendidas. En este sentido, la Comisión va a relanzar el debate sobre la gobernanza económica y buscará un acuerdo antes de 2023. Pero la mirada tiene que ser más amplia y la preocupación de Von der Leyen se situó en los semiconductores, claves para el sector tecnológico y que ahora pasan por un momento de escasez. "Impulsar este sector es una cuestión de soberanía técnica. Vamos a presentar una nueva ley europea de chips", aseguró la presidenta del Ejecutivo comunitario.

La pandemia, continuó, "ha dejado profundas cicatrices" y por ello "es importante proteger el pilar europeo de derechos sociales". Así, Von der Leyen aseguró que la justicia social pasa por la justicia fiscal y ese es el motivo para proponer un proyecto de ley dirigida a destapar los beneficios ocultos tras sociedades pantallas. "Pagar un impuesto justo es una cuestión de justicia pura y simple", desarrolló. El objetivo es, sostuvo, que se creen "nuevas brechas" en las siguientes generaciones porque "Europa necesita a sus jóvenes". Sobre esto, Von der Leyen anunció una propuesta para que el 2022 sea el año europeo de la juventud.

En clima la UE avanza, pero los demás también tienen que hacerlo

¿Y el pilar climático? Es otro de los principales caminos que tiene que recorrer la UE. "Somos nosotros los que hemos producido este cambio climático y es pésimo, pero podemos cambiarlo", explicó la presidenta, que reivindicó que con el Pacto Verde se hayan convertido "los objetivos climáticos en legislación de obligado cumplimiento". De nuevo, Von der Leyen insistió en que las ambiciones climáticas "tienen que ir acompañadas de una ambición social".

"Cuento con los Estados miembros y con el Parlamento para mantener esa ambición", comentó, al tiempo que ponía en duda que China vaya a cumplir sus objetivos y aseguraba que la lucha "es de todos". Así, la UE va a multiplicar por dos su fondo para la biodiversidad para el exterior en 2022. "Europa está dispuesta a hacer más, pero esperamos que los demás hagan lo propio", sentenció la líder.

Abarcó entonces el asunto de la autonomía estratégica. "Este liderazgo económico y climático refleja un cambio en el orden internacional", arrancó Von der Leyen, quien aseguró que estamos ante una nueva era "de hipercompetitividad" en la que habrá "quienes no se amedrenten ante nada". Eso es lo que ha mostrado, dijo, la crisis en Afganistán. "Nosotros apoyamos al pueblo afgano y por ello aumentaremos la ayuda humanitaria", siguió, calificando esta situación como un "síntoma" de ese cambio de paradigma.

"La solución no puede ser cooperar menos", avisó, y en ese sentido lanzó un mensaje para que se refuerce la Unión Europea de Defensa, pero sin dejar de entenderse con la OTAN como hasta ahora. "Europa puede y creo que tendría que estar dispuesta a ser más independiente", reconoció. Pero uno de los primeros pasos es conseguir que "los países vecinos sean estables". De esa manera "podemos hacer frente y prevenir crisis sociales, con nuestra actuación diplomática".

"Falta de voluntad política"

"El mayor freno ante esto no es la falta de capacidades, sino la falta de voluntad política", avisó Von der Leyen. Y esa voluntad debe mostrarse también para hacer frente a las amenazas cibernéticas. "No podemos hablar de defensa sin mencionar la defensa cibernética, y debemos cerrar filas porque nuestros recursos aquí son escasos. Debemos ser líderes en seguridad cibernética", sostuvo Ursula von der Leyen. Precisamente en esa situación, se celebrará una cumbre sobre la Unión Europea de Defensa durante la presidencia francesa de 2022.

¿Y en cuanto a la migración? Von der Leyen ha pedido "un enfoque común" y recalcó que "el Nuevo Pacto sobre Migración y Asilo nos da todo lo que necesitamos" por lo que llamó a los Estados y al Parlamento a avanzar en las negociaciones. La prioridad, dijo, debe ser proteger a las personas que huyen de situaciones como la que se vive en Afganistán.

"La libertad es estar exentos de miedo"

Von der Leyen terminó refiriéndose, aunque de refilón, al Estado de Derecho y a la situación del colectivo LGTBI ante las últimas medidas anunciadas por los gobiernos polaco y húngaro. "Defender nuestros valores es defender nuestra libertad: de amar a quien queramos, de ser quienes somos", sostuvo. La presidenta aseguró que la libertad "es estar exentos de miedo" y anunció que antes de que acabe el año la Comisión propondrá una legislación contra la violencia machista.

Para cerrar su intervención, Von der Leyen explicó el caso de la medallista paralímpica italiana, Beatrice Vio, que acaba de llegar de los Juegos de Tokio y que luchó por su vida solo meses antes de la cita deportiva. La presidenta puso a la deportista como ejemplo de los valores europeos y acabó con una arenga: "Si parece imposible, puede hacerse".