De esta forma, en Ribadesella impidieron una aglomeración de unas 700 personas realizando botellón que no guardaban las medidas sanitarias obligatorias, mientras que en la Atalaya, también en Ribadesella, evitaron otro botellón de unas 150 personas.

En Llanes evitaron un botellón en Celorio, de 50 personas, y en el mirador de San Pedro, donde había unas 500 personas. Algunos asistentes arrojaron botellas a los agentes. En ese mismo municipio se evitó una aglomeración de unas 25 personas realizando botellón. En el área recreativa de Garaña-Llanes acabaron con otro botellón con medio centenar de personas que cantaban y perturbaban al resto de personas alojadas.

Por lo que se refiere al municipio de Parres, En Arriondas la Guardia Civil terminó con un botellón de unas 25 personas. En Salinas, en el municipio de Castrillón, los agentes intervinieron en varias zonas para impedir varios botellones. Fue en La Peñona en el Museo de las Anclas, el Paseo Marítimo de la zona de El Náutico, La zona de las dunas en San Juan de Nieva, el Parque de la Deva y la zona de la Colonia.

Mientras, en Luanco (Gozón), hubo varios requerimientos, por aglomeraciones de escasa entidad. Los agentes tuvieron que emplearse más a fondo en el vecino Candás, donde disolvieron cuatro botellones en Parque Ingles, Valdes Pumarino, parque Museo Anton y Paseo Marítimo.