Según un comunicado emitido por la UPO, la principal misión de la Fundación AK Antonio Guerrero es lograr la verdadera integración de las personas con diversidad funcional, así como la garantía de cobertura de sus necesidades, desde que nacen y durante toda su vida. Así, la fundación desarrolla una serie de proyectos con el objetivo de ayudar a los que más lo necesiten, desde el aspecto asistencial, educativo, de empleo, protección, formación profesional, escuela de oficios, deportivo, entre otros.

Uno de estos proyectos es el Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT) situado en el Polígono Sur de Sevilla, barrio que comparte con la Residencia Universitaria Flora Tristán de la UPO, por lo que, con la firma de este convenio se potencian sinergias entre ambas instituciones y, principalmente, entre el CAIT y la Flora Tristán, en cuyas instalaciones se desarrollarán acciones sociales coordinadas.

Además, los becarios de la residencia de la UPO colaborarán en las actuaciones que la Fundación AK ponga en marcha en el Polígono Sur, principalmente con los niños con diversidad funcional a los que asiste en el Centro de Atención Infantil Temprana.

Otra de las acciones que contempla el convenio es la realización de prácticas curriculares y extracurriculares del estudiantado de Grado y Máster, asesoramiento y colaboración en programas y proyectos que promuevan mejora de la salud, hábitos saludables, calidad de vida y, en general, en cualquier ámbito de actuación social como puede ser educación, formación, asesoramiento, información, orientación, concienciación y divulgación de los derechos inherentes a las personas, entre otros.

En su intervención, el rector de la UPO ha resaltado la importancia de la firma de este convenio "centrado en la dimensión social de la diversidad funcional". Además, ha destacado los lazos de colaboración entre las dos instituciones y la importancia de la implicación de las personas y también de la Universidad en los distintos problemas de la sociedad.

Ha añadido que "es un honor que los estudiantes puedan realizar prácticas en la Fundación y que los becarios y becarias de la Flora puedan participar en las acciones llevadas a cabo en el CAIT del Polígono Sur, una apuesta valiente y valiosa", subrayando la promoción de hábitos saludables que contempla este convenio, "que construyen una sociedad sostenible".

Por su parte, el presidente de la Asociación AK Guerrero ha destacado cómo "con la ayuda de la universidad se da otro paso adelante para mejorar la vida de los niños con diversidad funcional en un barrio como es el Polígono Sur".

Guerrero ha apuntado que, con este acuerdo, se abren "múltiples abanicos, se inicia el diálogo y se pone en marcha distintas iniciativas que poco a poco se van haciendo realidad, unos proyectos que sin las sinergias creadas entre ambas instituciones no se podrían llevar a cabo".

En el acto también han estado presentes el vicerrector de Cultura y Políticas Sociales, David Cobos; la directora académica de Integración y Diversidad Funcional, María José Parejo; la directora académica del Aula Abierta de Mayores de la UPO, Rocío Cruz Díaz; el investigador de la UPO y referente en el estudio de las enfermedades raras José Antonio Sánchez; la vicepresidenta de la Asociación AK Guerrero, Katy Herrero; la directora del CAIT del Polígono Sur, María Megina; la trabajadora social de la Fundación María Cortés; el fisioterapeuta del CAIT, Carlos Carrasco; la psicóloga clínica de la Unidad de Maduración del Hospital Macarena Antonia Márquez y el asesor cultural de la Fundación y director de Recursos Humanos de Endesa, David Pena.

RESIDENCIA UNIVERSITARIA FLORA TRISTÁN

La Residencia Universitaria Flora Tristán fue creada el 24 de marzo de 2004 y es dependiente del Vicerrectorado de Cultura y Políticas Sociales y gestionada por la Fundación Universidad Pablo de Olavide. Es una iniciativa pionera en Andalucía que pretende proporcionar al estudiantado universitario una formación humana integral más allá del ámbito académico, además de contribuir a la revitalización del Polígono Sur a través de la presencia cotidiana de estos jóvenes en el barrio.

La Flora supone, así, "un ejemplo de transferencia del conocimiento y de las activas políticas sociales que desarrolla la UPO, seña identitaria de la institución".