Belén Esteban está dispuesta a ir a por todo en el litigio que mantiene con Toño Sanchís, el que fuera su representante y al que ella consideraba prácticamente parte de su familia.
Según publica la revista Semana, donde la de Paracuellos da una extensa exclusiva, esta ha puesto una querella criminal a su exagente y su mujer.
"Voy a llegar hasta el final. Está en juego mi dignidad", declara a la revista la colaboradora de Sálvame, que desvela que les imputa cuatro delitos -apropiación indebida, alzamiento de bienes, falsedad documental contable y tentativa de estafa procesal-que conllevan incluso penas de prisión de hasta seis años.
La madrileña se muestra tranquila y contenta, "porque hasta ahora la Justicia me ha dado la razón", dice.
Según la información de la revista, el proceso ya está en marcha, ya que Sanchís y su mujer ya han tenido que ir ante el juez para declarar.
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