Las monitoras calculan que todo el proceso les llevará horas. Y no es la primera vez que tienen que recurrir incluso a los padres de las gimnastas para hacer «la mudanza». Para celebrar los Juegos Escolares en el Palacio de los Deportes, veinte personas tardaron más de cuatro horas en desmontar, trasladar el material y montarlo en la pista.

Esta vez tendrán que descargar un tráiler y dos camiones. «Empezaremos el lunes a las tres de la tarde y a saber a qué hora acabamos, porque necesitamos hacerlo todo de una sola vez», subraya la entrenadora del Club Flip Flap, Ana Ordóñez, que colabora con la Federación Aragonesa de Gimnasia.

En total, los voluntarios tendrán que poner en marcha los aparatos y dos pistas completas en el pabellón Siglo XXI, en el que competirán más de quinientos deportistas del 9 al 12 de julio. «La federación hace todo lo que puede; más es imposible, porque no hay medios ni subvenciones suficientes», explican.

Para preparar este campeonato, cinco gimnastas entrenan de forma provisional en el pabellón César Augusto. Durante el curso tienen que montar y desmontar los aparatos en cada entrenamiento en el pabellón Siglo XXI. En el Centro Aragonés del Deporte también entrenan, con aparatos fijos.

Los deportistas reclaman un espacio fijo para entrenar, lo que facilitaría además enormemente el montaje de los aparatos y evitaría traslados, que conllevan el deterioro de muchos aparatos y el consiguiente gasto extra. «Hay afición; sólo este año hemos tenido que rechazar a más de treinta niños», subraya Ana. El Ayuntamiento señala que «es imposible dotarles de un espacio fijo propio y se ha intentado negociar para que entrenen con aparatos movibles en zonas compartidas», señalan fuentes del Área Municipal de Deportes.

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