Así es Alberto, el hijo (y sustituto en la radio este verano) de Carlos Herrera

Alberto Herrera, hijo de Carlos Herrera y Mariló Montero.
Alberto Herrera, hijo de Carlos Herrera y Mariló Montero.
GTRES
Alberto Herrera, hijo de Carlos Herrera y Mariló Montero.

Este verano, tal y como ha informado El Español, durante las vacaciones de Carlos Herrera en la Cadena Cope, quien sustituirá al famoso periodista almeriense será otro Herrera, Alberto. Sí, su primogénito junto a Mariló Montero. Y sí, al que también ha picado el gusanillo del periodismo radiofónico a pesar de que todo hacía indicar que no seguiría los pasos de sus padres.

Aunque en los últimos meses ya se ha puesto a los mandos de la sección Yo te lo explico, papá en el que conversa con su padre de los temas candentes de la actualidad desde una perspectiva joven (tiene 28 años, aunque cumplirá 29 a finales de julio), no será hasta esta temporada estival cuando, junto a Bárbara Archilla, se hará cargo de la segunda parte del espacio Herrera en Cope, mientras que de 06.00 a 10.00h de la mañana será Pilar García Muñiz quien se sitúe ante los micrófonos.

Alberto Herrera Montero también es andaluz como su padre (Mariló es de Estella, en Navarra), aunque en su caso nació en Sevilla, lo que le ha marcado significativamente por sus escapadas al Rocío, sus amistades o su espíritu futbolístico, siendo bético de los pies a la cabeza, según detallan desde el perfil que le han realizado en Vanity Fair.

En este explican que en un principio intentó huir de la fama de sus padres, aunque con ambos guarda una estupenda relación y sigue estando estrechamente ligados a ambos a pesar del divorcio que protagonizaron en 2011 después de dos décadas casados. Para no enfrascarse en una carrera que parecía predestinada como era el periodismo, entre los partidos de fútbol con sus amigos escuchaba los vinilos y la música que le ponía su padre y se aficionó tanto que fructificaría en el futuro.

Sin embargo, su idea de porvenir cuando alcanzaba la mayoría de edad le hizo trasladarse a Madrid para estudiar Administración y Dirección de Empresas y Marketing en la Universidad privada y católica CEU San Pablo. Para sacarse un dinero extra, trabajó como camarero y personal de eventos, así como en una fábrica de metales.

Ello no impidió que, cuando optó por la rama de la publicidad, consiguiese un puesto en prácticas en 2015 como ejecutivo de cuentas en la prestigiosa agencia Ogilvy & Mather y un año después fundase junto a un amigo la agencia La peseta, que no sobrepasó el año de vida.

Esto no le desanimó (también es cierto que es más sencillo ser emprendedor cuando se tiene una cierta posición), porque desde marzo de ese mismo 2016 ya tenía otra compañía en la que centrarse: Mad and Digger, agencia de publicidad y marketing online fundada junto a otros tres amigos que ayudaba a pymes y startups a darse a conocer tanto a nivel local como internacionalmente. Esta empresa sigue funcionando, tiene dos sedes (Sevilla y Madrid) y Alberto ejerce las funciones de Business Consultor.

Pero al final, de tal(es) palo(s)... "Mi pasión por la radio comienza en casa; supongo que haber crecido entre micrófonos y haber trasteado en estudios durante toda mi vida me ha empujado en cierta manera", explicó en una entrevista con El País sobre su salto a la escena radiofónica.

Hasta entonces, lo que había hecho era una sección con otros niños en la que comentaban los partidos de fútbol de la semana. Pero de aquello hacía muchos años. Fue el año pasado, justo después de comenzar la pandemia del coronavirus en marzo, cuando unió su pasión por la música (toca el piano y la guitarra) con la genética y se convertía en presentador de Área 27, un programa que se emite los viernes a la medianoche en Rock FM.

"Lo que me enganchó a este mundo fue ese cariño por lo puro, por la calidez que te proporciona el sonido de la caída de una aguja sobre un vinilo que automáticamente da paso a eléctricas como las de Mink Neville, Clapton o Knopfler, a voces como las de Aretha, Joplin o Cocker, pianos como el de Wonder, Joel o Dr. John o ritmos como los de Baker, Moon o Watts", aseguró en la misma entrevista con El País.

¿A 'Masterchef'?

Aunque siempre ha preferido llevar una vida alejada de los focos, sus más de 31.000 seguidores en Instagram reconocen no solo su melena sino su buen hacer entre fogones y en sus stories destacadas tiene multitud de platos de elaboración propia que sorprenderían incluso a los jueces de Masterchef: ramen casero (él elabora incluso los noodles), un magret con patatas, setas con trufa y huevo, rodaballo o una crema de calabaza con ajo negro.

Quien ha disfrutado muchísimo de sus platos y de sus escapadas a las playas del sur de España, así como de su afición por los deportes acuáticos como el wakeboard ha sido su hermana, Rocío Crusset, que utiliza el apellido de su abuela paterna. Como solo se llevan un año, la unión entre ellos es increíble y Alberto lo demuestra continuamente en sus redes sociales. Además, le apoyó en su decisión de marcharse a Nueva York para continuar su carrera como modelo (donde ha firmado por la agencia IMG, donde también están Bella Hadid o Hailey Bieber).

Uno de sus grandes amigos desde que era pequeño es Jaime Soto, hijo del cantante José Manuel Soto, y que estuvo saliendo con su hermana hasta 2016. Sin embargo, aquella ruptura no significó que ellos dejasen de ser amigos y, en agosto de 2018, fundaron su propio equipo de fútbol, Club Atlético Central, del que Jaime es presidente y Alberto vicepresidente.

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