Desarrollado por la startup asturiana i4life, este sistema mantiene en contacto constante al usuario con el equipo médico, midiendo su estado de salud y avisando si el oxígeno en sangre es muy bajo y este precisa de ingreso hospitalario. Según ha explicado EDP en nota de prensa, el proyecto fue impulsado por el área de innovación y la Fundación EDP, y también cuenta con la participación del CEEI y SEMERGEN, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria. Esta última recibirá los aparatos y se encargará de entregarlos a las personas que participarán en el estudio piloto, 25 pacientes del sistema público de salud de toda España.

Las características de 'i4case', que advierte en caso de que la situación sea peligrosa y requiera hospitalización, le sitúan como un pronosticador favorable para pacientes vulnerables con patologías respiratorias y para aquellos positivos en COVID-19 que se encuentran aislados en sus domicilios. El sensor permite anticipar la atención y decisiones médicas.

El proyecto tiene previsto incorporar otro dispositivo en el hogar del paciente que mediría las condiciones ambientales (temperatura o humedad), de tal forma que los datos de ambos dispositivos permitirían realizar estudios de correlación, conociendo si las condiciones de una vivienda repercuten en la salud.