María José Campanario y Jesulín de Ubrique no dan pasos en falso. Siguen luchando para que la imagen de su hija, Julia Janeiro, esté protegida frente a informaciones y comentarios poco afortunados. A sus 18, la joven ya ha tenido que esquivar a familiares con los que nunca ha tenido relación, compañeros de pupitre que nunca ha conocido y colaboradores cuestionando comportamientos inexistentes durante su infancia. 

Por todo ello, 20Minutos ha podido saber que, siguiendo las directrices del abogado Antonio González Zapatero, se han solicitado medidas cautelares para que cese el acoso y se ha instado a los centros educativos en los que ha estudiado Julia a que emitan informes sobre su buen comportamiento. En silencio, sin ruidos ni comunicados, buscan, una vez más, que se haga justicia.