El agente escuchó los gritos de las empleadas del comercio y, junto a un vigilante de seguridad del hospital de la Malvarrosa y un aparcacoches, consiguieron detener al sospechoso, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

El suceso ocurrió sobre las 13.30 horas de este sábado, cuando una patrulla fue comisionada a un establecimiento de la avenida Malvarrosa donde, al parecer, el vigilante de seguridad del hospital próximo tenía retenido a un hombre que acababa de hurtar un bolso.

Una vez en el lugar, los agentes localizaron al vigilante de seguridad, acompañado de un agente fuera de servicio, los cuales retenían a un hombre.

Los agentes averiguaron que, momentos antes, el agente franco de servicio, que se encontraba realizando deporte por el paseo de la playa, fue alertado por los gritos de auxilio de las empleadas de un establecimiento de comida, ya que un hombre huía a la carrera y acababa de sustraer un bolso.

El agente emprendió la persecución, dándole alcance a los pocos metros junto a uno de los aparcacoches de la zona. Ambos consiguieron reducir al sospechoso. Al observar la escena, el vigilante de seguridad del hospital Malvarrosa acudió en ayuda de los hombres, y localizaron al retenido un bolso de color rosa.

A los pocos instantes se presentó en el lugar la víctima, que reconoció el bolso como de su propiedad, el cual contenía dos teléfonos móviles, además de otros enseres. Todo lo sustraído tenía un valor de 710 euros.

El detenido, de origen español y con numerosos antecedentes policiales, ha pasado a disposición judicial.