Cuando uno llega a los alrededores del hospital madrileño Isabel Zendal lo primero que hace es contar. Uno, dos, tres, quince, veinte... De repente, una esquina. Quizá entonces... pero no, la cola continúa más allá. Treinta, cuarenta, cincuenta... Pasado el centenar, uno desiste y deja de contar. La fila de gente para recibir la vacuna contra la Covid es inmensa este domingo. Se antoja interminable. Es entonces cuando la desesperación crece y se busca el final con ahínco.
"Fatal, fatal, es que dan ganas de irse", cuenta a este diario Carmen mientras pide la vez. La realidad es la siguiente: hay tantos madrileños convocados que la cola da una vuelta perfecta al hospital de pandemias. El último de la fila se choca con el primero, que lleva más de una hora esperando para poder recibir el suero.
Eso es precisamente lo que le ha ocurrido a Julia, de 59 años. "Qué desbarajuste. Esto no es organización ni es nada". Ella, al igual que María y Manuela, lleva una hora y diez haciendo cola, esperando turno. "Teníamos cita a las 11:40. Son las 12:50. Lo bueno es que ya llegamos".
A José, que ya está más cerca del final, le habían convocado en el Wizink Center, pero un mensaje el sábado por la noche, tan solo unas horas antes de la cita, cambió todo. La hora y la localización. "Muchos de los que estábamos aquí íbamos al Wizink, por eso hay estas colas. Nos han mandado a todos aquí", explica resignado.
También recibió ese mensaje Lola. Y Santi, y María, y Marisa... "No sé por qué te citan a una hora en concreto. Hay miles de personas, tenemos para varias horas". Los comentarios de quienes llegan los últimos oscilan entre la broma y la desesperación: "Esta es la libertad de Ayuso", "no sé quién organiza esto, pero...", "venga, que ya huele a jeringuilla".
El dispositivo de seguridad, en concreto, se ha visto reforzado, no sólo por la situación anómala de este domingo, sino por el colapso que sufrió el centro un día antes, el sábado, cuando fueron convocados por error cientos de estudiantes de Farmacia de forma "irresponsable".
Para hacer frente a esta situación, la Policía Nacional ha destinado hasta cinco dotaciones de las tres que acostumbra. "Esto es muy raro. Solemos venir todos los días y no hay estas colas. Pero entre lo de ayer y que hoy han desviado a gente de otros centros...".
La comunidad de Madrid ha confirmado este hecho a 20minutos: "El viernes se convocó en el Wizink Center a un grupo de edad que no correspondía, por eso han sido desviados al Zendal". Sólo este domingo, el hospital tiene previsto vacunar a 10.000 personas. Con Moderna a los menores de 60 años y con AstraZeneca a los mayores de esa franja.
A las 14:20 horas, una hora y veinte minutos más tarde de lo que ponía en el mensaje, Marisa sale con vacuna y contenta: "Ha merecido la pena, pero espero que para la segunda dosis esté mejor organizado". Un poco después, sobre las 14:30, la situación se estaba normalizando y las colas se había reducido.
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