Fiscalía, que pide 11 años de prisión, sostiene, en su escrito de calificación de los hechos, que en fecha no concretada del verano de 2014 el procesado, que residía en el partido judicial de Carballo con el resto de la familia, entró en la habitación de la menor, que entonces tenía 11 años.

"Una vez allí, la despertó y empezó a quitarse la ropa quedando desnudo de cintura para abajo", señala el Ministerio Público que explica que también desnudó de cintura para abajo a la menor y le dijo que iban a "hacer cosas de mayores, que estuviera tranquila, que no le iba a doler".

El procesado se detuvo ante los gritos de la niña, aunque le dijo que lo que había sucedido no debía decirlo a nadie pues si lo hacía la mandarían a un centro de menores. La niña nada dijo hasta el verano de 2017, iniciándose entonces un proceso judicial en el que se le prohibió comunicarse al acusado con ella. Además, se acordó suspender la patria potestad del hombre respecto a la menor.