Esto supondría eliminar la circulación de autobuses y sus paradas y la presencia de otros vehículos. Se plantea "reestudiar" y "reordenar" la movilidad actual en el entorno de la plaza, "dar prioridad a la movilidad peatonal" y la "opción de redefinir los itinerarios de transporte público que discurren" por este enclave.

Así lo ha indicado este lunes la vicealcaldesa de la ciudad, Sandra Gómez, también titular de Desarrollo Urbano, departamento que impulsa este concurso. Ha presentado en rueda de prensa estas bases coincidiendo con el primer aniversario, este martes, del cierre de la plaza del Ayuntamiento al tráfico para acometer la "peatonalización blanda" actual y lograr que dejara "de ser una rotonda para vehículos" y un espacio para los ciudadanos "solo en momentos puntuales".

"Las plazas son el reflejo del modelo de ciudad de cada generación histórica", ha expuesto, tras lo que ha señalado que la de ahora "reclama más espacios compartidos, comunes, seguros y la retirada del tráfico". Además, ha precisado que se contará con un presupuesto máximo de alrededor de 8,6 millones de euros para la ejecución de estas obras.

Gómez ha expuesto que se debe "empezar a hablar de la integración" de este espacio en su entorno, "del diseño que la nueva generación quiere" y ha destacado la convocatoria del concurso de ideas para "llamar a todos los profesionales a diseñar junto a la ciudadanía la plaza del futuro". Ha insistido en la participación ciudadana y ha recordado que se pidió "un espacio más abierto y seguro, con menos tráfico y con menos elemento que afearan el entorno".

En esta línea, ha dicho que se cuestionaba la continuidad del transporte público, se reclamaba que "siguiera siendo un lugar de encuentro", que continuara acogiendo las 'mascletaes' y las fallas del consistorio y que mantuviera los puestos de flores y la fuente "como elementos identitarios" aunque con la posibilidad de que sean "remodelados". Ha subrayado también que se pide "más espacios de sombra" e integración paisajística con los elementos del entorno".

Sandra Gómez, que ha afirmado que esto se tendrá que tener en cuenta en las propuestas para el concurso, ha señalado que esta última reclamación contempla revisar y "eliminar" elementos "que distorsionen" como rótulos de neón vinculados a publicidad o franquicias. Asimismo, ha subrayado la demanda para "fomentar" el comercio tradicional.

En cuanto al concurso, la vicealcaldesa ha explicado que tendrá dos fases, una primera -de diez días- en la que se seleccionarán los equipos que se presenten tras verificar que cumplen los requisitos y titulación académica que se requiere, y una segunda para elegir propuestas. Esta última contará a su vez con otras dos pasos.

En el primero, los participantes presentarán "de forma anónima" sus ideas, de las que saldrán entre 3 y 5 para pasar a la fase final -el jurado tendrá 60 días para hacer esa elección-. En un segundo paso, los equipos seleccionados volverá a presentar sus propuestas, aún de forma anónima y como anteproyectos -45 días-. Entre estos, el jurado elegirá la iniciativa ganadora del concurso -un mes-.

EXPOSICIÓN PÚBLICA

Habrá una exposición pública de las propuestas seleccionadas y la ciudadanía podrá hacer "sugerencias y propuestas de mejora", ha agregado la edil de Desarrollo Urbano, que ha hablado de "la importancia de mantener la participación ciudadana en todo el proceso".

Gómez ha detallado que podrán presentarse al concurso equipos con un arquitecto especializado en proyectos de urbanización en centro histórico o entorno protegido; un ingeniero civil o de obras públicas con la misma especialidad; un ingeniero industrial para el diseño de instalaciones; un arquitecto técnico o ingeniero de obras públicas especialista en planificación y control de obra; un especialista en movilidad y tráfico y otros en paisajismo, jardinería y arqueología.

La responsable municipal ha agregado que se contempla el pago de 9.680 euros (IVA incluido) a los entre 3 y 5 equipos que lleguen a la fase final. Al ganador se le premiará con la adjudicación del contrato de redacción del proyecto, que comprenderá el trabajo de redacción del proyecto básico y de ejecución y el resto de documentos previstos en los pliegos por un importe de 350.900 euros (IVA incluido).

La vicealcaldesa ha añadido que se excluirán del concurso las propuestas que superen en más de un 10 por ciento esa cifra. Para la redacción del proyecto se plantea un máximo de 6 meses desde la firma del contrato y para la ejecución de las obras, un máximo de 24 meses.

Sandra Gómez, que presidirá el jurado, ha avanzado que tendrá composición paritaria y que lo formará, en "al menos dos tercios", personal con "cualificación profesional". Así, habrá técnicos municipales de Proyectos Urbanos, Movilidad, Mantenimiento de Infraestructuras y Jardinería, y un arquitecto experto en espacios públicos elegido por el Ayuntamiento y el Colegio de Arquitectos.

A estos se sumará un ingeniero experto en infraestructuras y obras de urbanización elegido por el consistorio y el Colegio de Ingenieros de Caminos, y también representantes de la Conselleria de Cultura, del Colegio de Arquitectos y del de Ingenieros de Caminos.

"PUEDE CORRER MUCHO"

Los criterios de selección girarán en torno a la calidad global de la propuesta, el espacio público y el paisaje, la integración y participación social, la sostenibilidad y los criterios ambientales, usos y actividades y ordenación de la movilidad.

Sobre los plazo, Gómez ha dicho que este proceso "puede correr mucho", dado que como acordó el gobierno local, los concursos de ideas los lleva cada servicio competente, en este caso Proyectos Urbanos. "Eso permitirá correr más y restar plazos", ha expuesto.

No obstante, ha comentado que se trata de "un proyecto de largo plazo". "La realización del proyectos nos llevará 2021 y buena parte de 2022. La idea es intentar tener todo listo en 2022 para poder sacar el concurso de la obra en 2022-2023", ha señalado.