Remarca que dicho acuerdo de incoación, una vez publicado en el Diario Oficial de Galicia (DOG), ya "otorgaría automáticamente a dichos bienes las debidas cautelas para evitar que los Franco puedan ejercitar el derecho de retirada" que les reconoce el auto.
El Ayuntamiento de Sada, tanto en vía judicial como en administrativa, recuerda que "insistió durante todo el proceso en la necesidad de que la Xunta relacionara aquellos bienes muebles que por su significancia quedaban asociados a la categoría de sitio histórico". Una categoría -subraya- en la que continente (bien inmueble) y contenido (bienes muebles) conforman uno todo unitario.
"Desgraciadamente, ni el Juzgado en su momento, ni la Xunta atendieron tal demanda", ha lamentado, para añadir que esta demanda es ahora "urgente y necesaria" para evitar que la familia del dictador pueda "retirar bienes muebles de significativa y relevante importancia cultural y patrimonial".
PAZO "DESVALORIZADO"
"El Pazo de Meirás quedaría degradado y desvalorizado si los Franco retiran los bienes muebles de su interior", ha trasladado el alcalde de Sada, Benito Portela, antes de remarcar que la sentencia del 2 de septiembre "no ordenó la entrega de un bien cualquiera a su legítimo propietario, sino la entrega al Estado de un BIC con la categoría de sitio histórico".
También ha censurado algunas afirmaciones que incluye el auto de la Audiencia. "El Estado no incautó nada. Quien se apropió de bienes durante años fueron los Franco. El Estado de Derecho también es la defensa de la integridad de un BIC", ha zanjado.
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