El Ayuntamiento de Barcelona ha cobrado 1,2 millones de euros de las sanciones impuestas por incumplir las restricciones ante la Covid-19, según explicó este martes el teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, en una entrevista de 'Betevé'.

"Ya se está empezando a correr la voz y es bueno que corra: estas sanciones se deben pagar", ha advertido Batlle, que ha asegurado que todas las multas que se han interpuesto se tramitarán, también las que se han impuesto esta Semana Santa a turistas.

Ha apuntado que estas sanciones no tienen "un objetivo recaudatorio", que se pueden recurrir y, aunque el perfil de personas sancionadas es diverso, ha celebrado que la mayoría de la población está cumpliendo con las normas.

Controles de playas

Por otro lado, el teniente de alcalde ha explicado que el Gobierno municipal se plantea avanzar el servicio de control de playas a este abril para evitar aglomeraciones: "No renunciamos a hacerlo en las próximas semanas si vemos que hay una masificación excesiva".

El servicio de control de playas de Barcelona empieza en mayo, con el inicio de la temporada de baño, de manera que durante esta Semana Santa -cuando se han producido aglomeraciones de gente en las playas- no lo ha habido.