Amador Mohedano está en el centro de todas las polémicas desde que, en la segunda entrega del especial Rocío, contar la verdad para seguir viva, Rocío Carrasco confirmara un rumor que llevaba años circulando por los mentideros.

En concreto, el que explicaba que el hermano de Rocío Jurado había vendido la luna de miel de su sobrina con Antonio David. Un episodio que Amador siempre ha negado, pero que testimonios de incuestionable valor desmontan con datos de difícil invención, como el lugar exacto en el que se encontraba la entonces pareja o qué vuelo iban a tomar para llegar a su destino.

No se quedará callado. Amador está en negociaciones para responder a su sobrina y puede que sean unas palabras muy bien remuneradas. A fin de cuentas, está dispuesto a ponerle los puntos sobre las íes; pretende quitarle valor a lo que cuenta con ese dolor imposible de interpretar, ya que, tal vez, espolvorear credibilidad sobre sus palabras sería autoseñalarse. 

Quedan, insisten desde el entorno de Carrasco, algunas explicaciones por dar sobre su tío y se pondrán ver en las próximas semanas.