Quienes lleven tiempo buscando una buena excusa para comer en el restaurante Lasarte de Barcelona aquí tienen una inmejorable: su nuevo menú de mediodía que entre semana (de martes a viernes) ofrece una versión algo más corta y económica de los menús degustación de este tres estrellas Michelin.
Un restaurante con la firma de Martín Berasategui y que Paolo Casagrande ha conseguido convertir en uno de los más reconocidos del país y, por descontado, de Barcelona.
Si al leer menú del día alguien ha pensado que 2020 y la maldita pandemia ha golpeado realmente fuerte también a la alta gastronomía -o animado más de la cuenta- hay que aclarar lo primero que esto no es un menú del día de altos vuelos.
¿Y uno de esos menús ejecutivo? En realidad tampoco va por ahí la cosa, más allá de que cada uno lo llame o use como quiera. Este nuevo menú (150 euros, bebidas aparte) se plantea como una versión más corta de los degustación habituales, a 230 y 250 euros.
De hecho, no surge por una cuestión de precio, sino para adecuarse a los horarios de cierre de hostelería que dejaban un margen de apenas dos horas para la comida, incompatible con cualquiera de los menús largos de la casa.
Pese a que ahora hay más margen, la buena acogida -nos cuentan- les ha animado a mantenerlo entre las opciones de carta y degustación que se ofrecen entre semana.
Y es que no hay que olvidar que estamos en uno de los hoteles más lujosos de la ciudad, en un tres Estrellas y, más allá de los platos, la extensión del menú o el precio, el espacio -muy bien adaptado a la normativa y exigencias de seguridad actuales- y el exquisito servicio son los mismos.
También una de las cartas de vinos más espectaculares que han pasado por nuestras manos. Y detalles como una versión más reducida y manejable anotada a mano con una delicada caligrafía por Joan Carles Ibañez, jefe de sala y sumiller de Lasarte con recomendaciones del momento.
Este nuevo menú de mediodía consta de aperitivo, tres platos principales, postre y petit fours. No se trata de platos adaptados de los otros menús degustación ni mucho menos una versión low cost, sino que se ha confeccionado un menú a medida, combinando propuestas recientes con algunos clásicos de Martín y de Paolo.
Sin entrar en la descripción detallada del menú y los pases, nos han gustado especialmente platos como el tartar de calamar con yema de huevo líquida ola royal de pintada, cappelletti de trufa con salsa de foie-gras y Oporto. Dos buenos ejemplos de la alta cocina que se practica en esta casa alrededor de un gran producto.
Es verdad que hablamos de unas cifras que abren la puerta de magníficos restaurantes de la ciudad. Pero poder comer en Lasarte por este precio es un auténtico lujo, y una oportunidad única para quien quiera darse el capricho de sentarse en uno de los restaurantes más deseados del país.
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