Ventilar la casa con aire natural es una de las recomendaciones más extendidas a la hora de conseguir una atmósfera idónea dentro de las estancias del hogar. Este consejo hay que llevarlo a cabo incluso en los meses de invierno, a pesar del frío, ya que las concentraciones de CO2 dentro de casa pueden ser nocivas para los habitantes.
De hecho, con la situación actual, la ventilación se ha convertido en un punto clave para renovar el aire de los interiores cerrados, evitando los contagios por aerosoles, aunque no es el único motivo por el que hay que ventilar.
Aumentar la calidad del aire que se respira en en el interior es fundamental, por lo conviene llevar a cabo una ventilación regular y diaria, también durante los meses de invierno. Así, se pueden seguir algunas recomendaciones, como las que indican desde la información de Salud de la Comunidad de Madrid.
¿Cómo y cuánto tiempo hay que ventilar la casa?
En primer lugar, hay que abrir varias ventanas y/o puertas unos centímetros, de modo que se favorezca la ventilación cruzada, antes que abrir solo una ventana al completo. Además, es mejor si las ventanas y/o puertas están puestas en diagonal, ya que se favorece la corriente.
Todas las estancias deben ser ventiladas de forma diaria, por lo que conviene abrir la ventana para que entre aire nuevo durante, al menos, 15 minutos, también en invierno. De hecho, se debe priorizar la ventilación con aire exterior sobre el confort y la eficiencia energética.
Además, no se recomienda usar ventiladores, ya que estos no renuevan el aire del hogar, sino que únicamente lo mueven. Así, siempre debe primar la ventilación mediante aire natural del exterior.
Por otro lado, hay que saber que una adecuada ventilación no significa que las habitaciones tengan que estar muy frías. De hecho, si se mantiene la calefacción durante el invierno y se abre durante 15 minutos la ventana, se renovará el aire y no supondrá que un gran esfuerzo energético mantener caliente la estancia.
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