El 1 de julio de 2005 se adjudican por 1.508.256 euros las obras de ampliación de Colón a Begar, tras un concurso público. Pero en aquella fecha, el Ayuntamiento ya había decidido que además de la ampliación había que aprovechar y

Que lo hagan los mismos

Sólo 22 días después de la primera adjudicación, una arquitecta municipal presenta un informe en el que indica que «es técnicamente necesario» que la segunda obra se ejecute por la misma empresa con un procedimiento negociado sin publicidad (sin concurso).

La tramitación continua adelante y, en diciembre, la Secretaría del Ayuntamiento emite su informe (como hace con todos los proyectos), en el que explica que la fórmula usada para adjudicar la rehabilitación de la casa Colón incumple la ley.

El vicesecretario considera que el procedimiento negociado sólo se puede usar en casos excepcionales y «cuando haya una especificidad técnica (una circunstancia técnica muy especial) por la que la obra sólo se puede dar a una determinada empresa».

Además, asegura que la justificación de la arquitecta, de que es necesario que la rehabilitación la haga la misma empresa que el nuevo edificio, no es una especificidad técnica y, va más allá: señala que, de ser así, deberían haberse sacado los dos trabajos a contratación de una forma conjunta para no incumplir la ley. Ésta

Tras este informe, la arquitecta insiste en un anexo que es necesario que lo haga la misma constructora y que sí hay especificidad técnica.

Dos días después (enero de 2006), y sin ningún informe nuevo de la Secretaría del consistorio, se aprueba dar las obras de rehabilitación de la Casa Colón a Begar a quien, pese a no haber concurso, se pide que haga una oferta económica.

La constructora no baja un céntimo de lo presupuestado por el municipio (915.020 euros), cuando en el concurso en el que competía con otras empresas para la primera obra, las de ampliación, si bajó un 13%.

El Ayuntamiento también adjudicó a Begar de forma polémica la obra del colector.

"Por motivos técnicos"

Fuentes municipales recordaron que la arquitecta, en su segundo informe, justificó la necesidad de ir a un procedimiento abreviado por motivos técnicos, ya que en la cimentación del nuevo edificio habían surgido problemas que aconsejaban que la reforma la realizase la misma empresa.

Respecto al hecho de que no se contratasen las dos obras a la vez, las mismas fuentes precisaron que, inicialmente, sólo había dinero para afrontar la obra prioritaria, la de la ampliación. Después se obtuvo una subvención del Estado con la que se decidió reformar la antigua casa.

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