Según apuntan desde el Gobierno autonómico en nota de prensa, "tras un año de trabajo, el consejo ha elaborado un documento en el que se demandan, entre otras iniciativas, el incremento de actividades educativas a través del juego y el refuerzo del diálogo, tanto entre los menores como con los educadores".

El informe recoge la labor realizada en 2020 a través de asambleas y sesiones de juego mediante la técnica del 'escape room' -que consiste en resolver enigmas y pruebas en grupo-, hasta dar con una solución al problema que se plantea, y que ha motivado mucho a los menores de los centros. "Nos transmiten que el juego les resulta muy atractivo a la hora de aprender y tendremos en cuenta sus intereses para promocionar su desarrollo personal y cognitivo", ha explicado Álvarez.

El Consejo de Participación Infantil y Adolescente está formado por 26 niños y niñas que representan a todos los que residen en casas infantiles.

"Desde la consejería siempre tenemos en cuenta la opinión de las personas que viven en nuestros recursos, porque son quienes mejor nos pueden transmitir sus necesidades y fortalezas. Además, estos pequeños son el presente y futuro de esta comunidad y debemos atender sus propuestas", ha subrayado la consejera.