En general, las comunidades con más consumo son las del Norte y Canarias, mientras los niveles más bajos se localizan en el Sur de la Península. Tras Galicia y La Rioja, se sitúan Castilla y León (con 17,8 litros), Cantabria (17,3) y Canarias (17,2 litros).

También están por encima de la media Asturias (16,9), País Vasco (16,2), Aragón (16,2) y Extremadura (14,3), mientras regiones como Navarra (13,7), Baleares (13,4) y Cataluña (13,1) se sitúan en torno a la media aunque algo por debajo.

Los que menos consumen

Los consumos más bajos son los de Andalucía (12,8), Madrid (12), Murcia (11,5), Comunidad Valenciana (10,7) y Castilla La Mancha (9,6 litros). En total, el consumo de aceite ha aumentado en España, empujado sobre todo por el crecimiento que experimenta el aceite de oliva virgen, que desde el año 2000 acumula un aumento del 158 por ciento.

No obstante, la variedad más consumida sigue siendo el aceite de oliva, que representa el 45 por ciento del total de las ventas y cuyo consumo se mantiene estable. Los mayores consumidores de aceite son las parejas adultas sin hijos, los adultos independientes y los retirados. Y en el lado opuesto se sitúan las parejas con hijos menores de seis años.

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