Así consta en el proyecto de presupuestos regionales del Principado de Asturias para 2021, consultado por Europa Press y que será aprobado definitivamente esta semana.

El impuesto sobre Sucesiones y Donaciones es un tributo estatal cedido íntegramente a las comunidades autónomas que grava la transmisión gratuita de bienes y derechos por causa de muerte o a través de donaciones 'inter vivos'.

El Gobierno asturiano explica que la introducción de importantes beneficios fiscales para las transmisiones en línea directa ha provocado que actualmente menos del 1% de las herencias entre padres, hijos y cónyuges, tributen por este impuesto en nuestro territorio. Así, para las herencias en línea directa de menor importe, el impuesto en Asturias "es el más bajo del país", indican.

En lo que respecta al gravamen derivado de sucesiones los ingresos estimados para 2021 alcanzan un total de 66.950.000 euros, lo que supone el 88,49% del total de este impuesto.

En lo relativo a la modalidad de donaciones los ingresos previstos para el próximo ejercicio se estiman en 8.707.200 euros, importe que supone el 0,73% del total de impuestos directos.