Las dos capitales canarias acogen sendas caravanas de coches para exigir la paralización de la nueva ley de Educación

Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife han acogido este domingo sendas caravanas de coches organizadas por la plataforma Más Plurales -que aglutina a 49 colegios de enseñanza concertada y privada de las islas y que representa el 21% de la educación- para protestar contra la Ley Orgánica de la Mejora de la Educación (LOMLOE).

De esta manera, la protesta arrancó a las 10.00 horas en la capital tinerfeña y a las 11.00 en la grancanaria dentro de la convocatoria realizada en todo el territorio nacional, concluyendo a las 12.00 y 13.00 horas, respectivamente.

Según ha informado la organización, una vez que llegaron a los destinos y tras un recorrido circular por varias calles de las dos ciudades, se procedió a la lectura de un Manifiesto en el mismo punto de partida -el parking del Parque Marítimo (Tenerife) y El Sebadal (Gran Canaria)-.

Las protestas fueron secundadas por entidades y colectivos ciudadanos de docentes, familias, alumnos y titulares de centros educativos, que solicitaron la protección y continuidad de la pluralidad democrática de nuestro sistema educativo actual.

Por su parte, en el manifiesto se rechazó "que se limite y recorte la libertad de enseñanza", en defensa de la pluralidad de la escuela y de "la complementariedad de las redes pública y privada concertada".

Así, la plataforma criticó a la autoridades educativas por querer imponer "la distribución del alumnado" y una planificación arbitraria de la oferta educativa "sin tener en cuenta las necesidades reales de escolarización manifestadas por las familias".

De igual modo, se acusó a la Ley Celaá de promover un "modelo de inclusión radical que conduce a los actuales centros de educación especial a su progresiva desaparición" y se solicitó al Gobierno de España "una dotación suficiente de recursos para atender a los alumnos con discapacidad tanto en los centros ordinarios como en los colegios de educación especial y que los padres puedan elegir el que consideren mejor para sus hijos".

Igualmente, exigieron "mejoras reales para el personal docente y no docente de los centros educativos", se reclamó al Estado una financiación adecuada "de los centros educativos públicos y concertados para garantizar la gratuidad real de ambos" y se denunció "la imposición de una ideología laicista impropia de un Estado no confesional".

Finalmente, en el Manifiesto se solicitó a los grupos políticos que no aprueben la LOMLOE en el Senado y que abran un debate "profundo y serio" para dotar al sistema educativo de estabilidad.

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