Discutieron por la herencia y M. R. U., de 17 años, mató a puñaladas su tía, Isabel Uría Uría, de 49 años, y dejó herida a su abuela, María Uría Fernández, de 84. Ocurrió ayer en el sexto piso del número 5 de la calle Félix Aramburu, en pleno centro de Oviedo.

El chico no vivía en el edificio, sino con su padre, profesor en el Instituto de Noreña, en el barrio de Fozaneldi.

Su madre, hermana e hija de las víctimas, murió hace tres años de cáncer. La familia tenía tres pisos en el inmueble de la calle Félix Aramburu y el chico fue a verlas para que les diera dinero. Pero las mató.

Llamó a la Policía a mediodía diciendo que "había matado a sus abuelos". Cuando los agentes y los médicos llegaron las dos mujeres, la tía y la abuela, aún estaban vivas. A la primera se la encontraron tendida en uno de los rellanos del edificio con varias puñaladas y llena de sangre. La intentaron reanimar pero falleció.

Continuaron subiendo las escaleras y encontraron al joven lleno de sangre y con un cuchillo en la mano. Dijo que él había llamado a la Policía. Al entrar en el piso, los agentes encontraron en un sillón a la abuela con heridas en brazos y piernas.

Hoy el joven ha declarado ante el fiscal del Juzgado de Menores. Ha ordenado su internamiento en el Centro de Menores de Sograndio.

CONSULTA MÁS NOTICIAS DE OVIEDO Y GIJÓN