Que la pandemia ha cambiado nuestra forma de vida es un hecho a todas luces irrefutable. Desde nuestra forma de relacionarnos hasta la manera en la que nos desplazamos se ha visto afectada por el coronavirus. Una de las situaciones más complicadas que los ciudadanos hemos tenido que afrontar ha sido el estricto confinamiento domiciliario decretado por el Gobierno el pasado mes de marzo. 

En esas semanas, muchas personas se dieron cuenta de la importancia de tener una casa con mejores condiciones de habitabilidad. Este hecho se ha confirmado este lunes en el análisis sobre el impacto de la pandemia en la vivienda que ha hecho público el Colegio de Registradores de la Propiedad de España con datos correspondientes al tercer trimestre del año, donde se registraron 102.197 compraventas de viviendas -el dato incluye vivienda usada (79.548) y nueva (22.649)-, lo que supone un 16,6% menos que un año antes. No obstante, hay un incremento del 33,5% sobre el trimestre anterior.

Los registradores han constatado que se ha intensificado la compra de viviendas unifamiliares, normalmente con mayor superficie y espacios abiertos como terrazas y jardines.  En concreto, esta tipología de vivienda acaparó entre julio, agosto y septiembre el 20,4% de las compraventas frente al 19,1% del año anterior. 

Con estos datos, los registradores han señalado que se está ratificando el cambio de preferencias de los ciudadanos, que buscan viviendas más grandes en el actual contexto de crisis sanitaria y en previsión de futuros nuevos confinamientos.

De hecho, en el tercer trimestre el 53,3% de las compras de pisos fueron de más de 80 metros cuadrados, una modalidad que ha registrado un incremento de casi 3 puntos con relación al mismo trimestre de 2019. 

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Tendencia a vivir fuera de Madrid o Barcelona

El documento también ha confirmado que existe una cierta inercia hacia la búsqueda de vivienda fuera de las grandes ciudades. Tomando, por ejemplo, las cuatro grandes capitales de provincia, Madrid ha registrado en el último trimestre un peso del 47,3%, siendo que a mediados de 2015 suponía el 57,7% de las compraventas de la provincia. 

En Barcelona el peso es del 23,8% y a mediados de 2014 representaba el 36,1% de las compraventas de la provincia. Valencia mostró un peso del 28,05% y a finales de 2016 estaba en el 37,3%. Por último, Sevilla registra el 36,8% de las compraventas de vivienda de la provincia, mientras que a finales de 2016 superaba el 50%.

RESGITRADORES DE LA PROPIEDAD

Perfil mayoritario: mujer, de 40 años y con hijos

Sobre el perfil de los compradores, por otra parte, un informe del portal inmobiliario Fotocasa señala que el "potencial comprador es similar al que encontrábamos antes de la pandemia". En la actualidad, habría un 21% de particulares mayores de 18 años que se plantea comprar una vivienda en los próximos cinco años. El perfil mayoritario del potencial comprador de vivienda tras la pandemia sería el de una mujer de clase media que ronda los 40 años y que viven con su pareja e hijos. 

"Es muy importante no perder de vista a estos futuros potenciales compradores porque parte de la recuperación y el dinamismo del mercado inmobiliario del futuro estará en sus manos. Está claro que, debido a la situación actual provocada por la crisis del coronavirus, muchos españoles han decidido posponer la compra de vivienda para más adelante, pero ha surgido otro grupo igualmente mayor de españoles que se plantea incorporarse al mercado inmobiliario, cuando antes de la pandemia ni lo estaban pensando. Será muy importante poder dar respuesta a esta demanda potencial que en poco tiempo piensa incorporarse al mercado inmobiliario”, analiza Anaïs López, directora de comunicación del portal inmobiliario.