El conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Sàmper, ha confirmado este lunes que agentes antidisturbios de la Brigada Mòbil de los Mossos d' Esquadra vigilarán día y noche el Palau de la Generalitat de plaza Sant Jaume de Barcelona tras el ataque con pintura y sangre animal que recibió su fachada el pasado sábado durante una protesta del sector de la restauración. 

Se produjeron identificaciones y denuncias penales por los hechos a cuatro personas que serán llamadas a prestar declaración por lo sucedido. En la protesta participaron una decena de personas.

Sámper ha resaltado este lunes que el Palau estará protegido "las 24 horas los siete días de la semana" y eso "mientras no desaparezca la frustración de ciertos sectores de la sociedad por la pandemia". 

El Palau estará protegido "las 24 horas los siete días de la semana mientras no desaparezca la frustración de ciertos sectores de la sociedad por la pandemia", ha afirmado el conseller de Interior, 
Miquel Sàmper

El Palau no será el único edificio que será sometido a especial vigilancia, pues también se blindarán las sedes de diversos departamentos de la Generalitat como los de Interior, Empresa y Salut. Lo mismo que los actos públicos que protagonicen miembros del Govern. 

El pasado domingo, tras los incidentes en Sant Jaume, se produjo una reunión de urgencia para tratar la cuestión entre el conseller Sàmper, el director general dels Mossos d'Esquadra, Pere Ferrer, y el comisario en jefe de la policía catalana, Eduard Sallent. 

El gremio de restauración de Barcelona se desmarcó de lo sucedido el domingo. "Sus actos vandálicos y su lamentable violencia no representan las demandas legítimas de la restauración de Barcelona", declaró en Twitter su presidente, Roger Pallarols.