¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de Bilbao?

Los paseos por el parque de Doña Casilda, con las añas (niñeras), que iban con cofia y todo. ¡Ah! Y el barquillero.

La mejor banda sonora para disfrutar de la ciudad es...

La música de los años 60, quizá porque es la época en la que yo me movía por ahí y es la que más me gusta.

Cuando cierra los ojos y piensa en la capital, ve...

No sé, el Guggenheim, o el puente de Deusto.

¿Qué época del año le sienta mejor a la ciudad?

La primavera y el otoño. Demasiado calor no le sienta bien y la lluvia de otoño es algo típico de la ciudad.

Creo que todavía huele a fábrica, aunque ya no haya.

¿A qué sabe?

Diría que a bollo de mantequilla y a pastel de arroz.

Las mejores vistas están en...

Desde Artxanda es desde donde mejor se ve, aunque a mí me gusta la entrada por el puente de La Salve, la puerta de Bilbao...

Ama Bilbao...

Amo todo lo de Bilbao. Siempre digo que soy del mismo centro, soy del número 1 ó 2 de Colón de Larreategi.

Pero le desquicia...

Que no se pueda andar en coche por la ciudad, no hay aparcamiento. Y las bicicletas en las aceras.

¿Cuál fue su último viaje en metro?

De Bilbao a Neguri. Soy de los que me encanta el metro, pese a que no lo cojo mucho y a que antes no creía en él.

¿Qué edificio no se cansa de admirar?

Hay muchos. Me encantan casi todos los que hacen esquina.

¿Una película ambientada en Bilbao?

Mi novia está loca, de Enrique Urbizu, en la que yo hacía una pequeña aparición.

Cuando está fuera, ¿qué es lo que más echa de menos?

La comida y la propia ciudad, hasta cuando decían que era más fea.

¿En qué lugar de la comunidad le gustaría que esparcieran sus cenizas?

Seguramente iría a Derio, donde está toda mi familia.

BIO Nació en Bilbao en 1942. Le puso Smith&Smith a sus tiendas porque «decían que en Bilbao éramos muy ingleses».

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE BILBAO