La Guardia Civil y la Policía Nacional han desarticulado en Melilla una red dedicada a la introducción de inmigrantes ilegales en dobles fondos de vehículos a través de la frontera con Marruecos, en una intervención en la que se ha detenido a diecisiete personas.

El delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, ha informado del desarrollo de la "Operación Gaviota", cuyas investigaciones se iniciaron hace unos seis meses, supervisadas por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Melilla.

Los diecisiete detenidos son varones, quince de nacionalidad española y dos marroquíes con residencia en España, entre ellos un hombre de unos ochenta años.

Las investigaciones se iniciaron en julio del año pasado con la intervención de varios vehículos en los que viajaban ocultos en pequeños habitáculos inmigrantes, entre ellos también mujeres embarazadas.

La red más importante

El delegado del Gobierno ha resaltado que se trataba de la red más importante de la ciudad, cuyos integrantes se enfrentan a penas de hasta ocho años de cárcel por supuestos delitos de tráfico de personas y asociación ilícita.

La red se encontraba "fuertemente jerarquizada" y operaba entre Melilla y Marruecos. También han sido detenidas las personas encargadas de conducir los vehículos, en su mayoría carentes de recursos económicos y en algunos casos con antecedentes penales.

Escobar no ha concretado cuántos inmigrantes han podido entrar a la ciudad mediante esta red, ni cuánto dinero ha podido manejar a lo largo del año en el que ha estado actuando, ya que son datos que se siguen investigando.

El delegado ha destacado la colaboración que ha existido entre la Policía y la Guardia Civil, que ha permitido que las investigaciones hayan dado sus frutos.

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