La moción del PP ha sido debatida en el pleno del Ayuntamiento hispalense, tras rechazar el Congreso de los Diputados el decreto Ley emanado del acuerdo alcanzado al respecto entre el Ejecutivo central y la Federación Española de Municipios y Provincias para el uso de los remanentes acumulados por las entidades locales, al votar en contra el PP, Vox, ERC, JxCat, Compromís, BNG, PNV, EH Bildu, Coalición Canaria, UPN, la CUP, Foro, Nueva Canarias, PRC y Más País.

El citado mecanismo, de adhesión voluntaria por parte de ayuntamientos y diputaciones, proponía que tales entidades cediesen sus remanentes de tesorería a la Administración General del Estado a modo de préstamo, tras lo cual se les realizaría "un ingreso no financiero" de al menos el 35% de la cuantía aportada como préstamo en cada caso, con un fondo máximo de 5.000 millones de euros para satisfacer las devoluciones iniciales a las entidades locales que participasen, pudiendo ya las mismas emplear ese dinero.

Este ingreso no financiero sería transferido entre 2020 y 2022 a las entidades locales participantes y, de otro lado, en diez años a contar desde 2022 les sería devuelta la cuantía completa, entre otros aspectos como un fondo estatal de 275 millones para compensar el déficit de los transportes colectivos municipales.

En ese sentido, la moción del PP, defendida por el concejal Juan de la Rosa, indicaba que el mencionado mecanismo acordado entre el Gobierno central y la FEMP no respondía a "las necesidades y peticiones de las entidades locales", rememorando que la junta de gobierno de la FEMP aprobó dicho acuerdo "con los únicos votos a favor de los alcaldes socialistas más el voto de calidad del presidente, el socialista Abel Caballero".

EL PP INSISTE EN EL "ROBO"

Asegurando que dicho acuerdo resultaba "absolutamente lesivo" para las entidades locales e invocando la autonomía de los mismos, la moción del PP acusa al alcalde, el socialista Juan Espadas, de apoyar este "robo" después de haberse posicionado "en contra de tal medida", atisbando que el primer edil actúa por "intereses más allá de los meramente municipales en su cambio de opinión, tendente a la claudicación ante el presidente de su partido".

Dado el caso, entre los ocho puntos de la moción figuraba el rechazo a la negociación previamente mantenida entre el Gobierno y la FEMP, considerando que se redujo a "los representantes socialistas y de Unidas Podemos, excluyendo al resto de fuerzas políticas"; solicitar a la FEMP que promueva la reprobación de su presidente; rechazar "cualquier medida del Gobierno tendente a apropiarse de los ahorros", incluyendo la vía de los préstamos; o reclamar un "fondo incondicionado de 5.000 millones de euros en ayudas directas a los ayuntamientos y un fondo específico de 1.000 millones de euros para compensar el déficit en los servicios de transporte público", sin cargo a los recursos municipales.

Durante el debate plenario, el concejal de Vox Gonzalo García de Polavieja ha señalado la moción promovida por su formación en demanda de abandonar la FEMP a cuenta de este asunto, mientras en el caso de Cs, Lorenzo López Aparicio ha avisado de que el decreto Ley tumbado por el pleno del Congreso "no respetaba" los acuerdos de la comisión de reconstrucción promovida ante la nueva crisis ni los acuerdos alcanzados en primavera en el seno de la FEMP. Por eso, ha pedido que el Gobierno central "se esfuerce por alcanzar un acuerdo" con el resto de partidos.

DEMASIADA "CRISPACIÓN"

Por Adelante Sevilla, Daniel González Rojas ha acusado al PP de instigar "la crispación" en la FEMP y ha señalado que tras la votación en el Congreso, hay una "segunda oportunidad" de proponer una fórmula para la movilización de los remanentes municipales, lo que a su juicio debe "garantizar" las compensaciones económicas a los municipios por su pérdida de ingresos en materia de transporte público y un "fondo extraordinario" que abarque a los ayuntamientos carentes de remanentes.

El popular Juan de la Rosa, de su lado, ha defendido la "postura clara que siempre" ha mantenido el PP "en defensa de los ahorros" de los ayuntamientos, insistiendo en que Espadas "ha hecho el ridículo más espantoso" con sus posiciones en la materia, reclamándole una vez más que "deje los intereses personales y partidistas" y sus propósitos de "afianzar posiciones en el PSOE".

"Seguiremos teniendo la oportunidad de gestionar 94 millones del superávit y 58 millones de remanentes, sin entrar en los 115 millones de fondos bancarios", ha enfatizado Juan de la Rosa, respecto al escenario posterior a la votación celebrada en el Congreso.

Finalmente, Juan Espadas ha reiterado que al no prosperar en el Congreso el mencionado decreto Ley, el Ayuntamiento ha "perdido" una oportunidad para movilizar unos 65 millones de euros frente a la nueva crisis. Pero especialmente, ha criticado que el PP haya aludido en repetidas ocasiones al mencionado mecanismo acordado entre el Gobierno y la FEMP, hablando de "robo y confiscación" de los ahorros municipales.

"DOBLAR EL PULSO AL GOBIERNO"

Al tratarse de un mecanismo de adhesión voluntaria, Espadas ha negado cualquier "robo", argumentando que los mencionados remanentes municipales están bloqueados por la Ley estatal de Estabilidad Presupuestaria promulgada en 2012 por el entonces Gobierno central del PP y que a falta de "tiempo" para modificar dicha regulación, era necesario buscar una fórmula alternativa. "El PP ha preferido doblar el pulso al Gobierno, porque su única estrategia es volcar al Ejecutivo", ha criticado, reclamando "un acuerdo equilibrado para desbloquear esos fondos que confiscó el PP en 2012".

La moción del PP, en cualquier caso, ha sido rechazada al contar con el apoyo del PP y Cs, pero oponerse el PSOE y Adelante y abstenerse Vox, ante lo cual el PP ha lamentado la "negativa" de los socialistas a su moción.