Puigdemont, presos y diputados apoyan a Torra antes de la vista en el Supremo

El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y el presidente Quim Torra, el 2 de mayo de 2019.
Puigdemont y Torra, durante una manifestación delante de la Comisión Europea en 2019.
ACN
El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y el presidente Quim Torra, el 2 de mayo de 2019.

El president de la Generalitat, Quim Torra, se encuentra en estos momentos (11.30 horas) en las inmediaciones del Tribunal Supremo en Madrid, acompañado del vicepresident, Pere Aragonès, y la consellera portavoz, Meritxell Budó. Ambos acompañarán en los próximos minutos a Torra a la vista a la que acude a las 12 horas ante el alto tribunal. En sala le esperan cinco jueces, tres de ellos, formaron parte del juicio del procés. 

Han completado la comitiva que ha arropado a Torra antes de entrar al Supremo los líderes de Òmnium y la ANC, Marcel Mauri y Elisenda Paluzie, los diputados en el Congreso de JxCat Laura Borràs y Sergi Miquel, los de ERC Montse Bassa y Gabriel Rufián, y del de la CUP, Albert Botran.

La esposa del president, el diputado de Demòcrates en el Parlament, Albert Castellà, y parte de su equipo más próximo en el Palau de la Generalitat han cerrado la comitiva que le ha acompañado a las puertas del tribunal. 

El expresidente catalán Carles Puigdemont, presos del "procés" y diputados independentistas han expresado su apoyo al presidente de la Generalitat, Quim Torra, horas antes de la vista en el Tribunal Supremo que deberá decidir si confirma su inhabilitación por desobediencia. 

En diciembre de 2019, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) condenó a Torra a una pena de año y medio de inhabilitación por negarse a retirar símbolos que se consideraban partidistas, como una pancarta a favor de los "presos y exiliados" y otra a favor de la libertad de expresión, colgadas en los edificios públicos en período electoral. 

Horas antes de que el Supremo vea el recurso del presidente catalán a su condena, su predecesor, Carles Puigdemont, ha escrito en redes sociales: "Hoy el presidente de la Generalitat está ante la justicia española por ejercer un derecho fundamental. No lo normalicemos, no dejemos que la represión banalice derechos fundamentales. Mucha fuerza president". 

El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, también ha expresado su apoyo a Torra, antes de su vista en el Tribunal Supremo (TS): "¡No nos harán claudicar!".

En un tuit, ha explicado que ha acudido a Madrid para acompañar a Torra y mostrarle "todo el apoyo en este nuevo ataque judicial".

Otro mensaje de apoyo a Torra lo ha lanzado el presidente del Parlament, el republicano Roger Torrent, que ha lamentado que, aunque "en un país normal colgar una pancarta no debería ser delito", "en el Estado español es motivo suficiente para inhabilitar a un president". 

Twitter también ha sido la plataforma escogida por algunos de los presos del "procés", que fueron juzgados en el TS, para arropar al actual presidente de la Generalitat. 

"Un Estado que impide juzgar a personajes como Martín Villa y ve normal juzgar a un presidente de Cataluña por una pancarta, ya lo dice todo sobre su nivel de calidad democrática y derechos y libertades. Mucha fuerza y dignidad", ha escrito el exconseller Jordi Turull. 

Otro preso de JxCat, Josep Rull, ha escrito: "El pueblo de Cataluña, a través del Parlament, es el único que puede nombrar -y eventualmente destituir- a los presidentes de la Generalitat. Todo el apoyo, president". 

Diputados de JxCat como Gemma Geis o Albert Batet también han expresado su apoyo a Torra.Por su parte, el vicepresidente del Parlament, Josep Costa, también de Junts, ha publicado: "Quizá ya basta de intentar culpabilizar al president Torra de su inhabilitación. Puso la pancarta y se negó a retirarla, pero eso no es ningún delito. Hacer caer al Govern por este hecho es absolutamente desproporcionado aquí y en cualquier democracia".

Desde la cuenta oficial de la CUP han expuesto: "Ningún tribunal puede silenciar la solidaridad. Tampoco la libertad de expresión. Hoy es Quim Torra, mañana puede ser cualquiera".

El diputado de la CUP en el Congreso, Albert Botran, ha denunciado la "persecución política" por parte de la justicia española hacia el president del Govern, Quim Torra. Botran ha denunciado que "el motivo de fondo" de esta causa no es el hecho concreto de haber colgado la pancarta, sino que es para "eliminar un enemigo político". 

El president de la Generalitat, Quim Torra, llega al Tribunal Supremo en Madrid. Acude a la vista pública para revisar su condena por un delito de desobediencia.
El president de la Generalitat, Quim Torra, llega al Tribunal Supremo en Madrid. Acude a la vista pública para revisar su condena por un delito de desobediencia.
EDUARDO PARRA / EUROPA PRESS

"Muchos presidents, incluyendo los tres últimos, han sufrido persecución política, y ahora estamos ante un juicio político", ha argumentado el diputado cupaire, que ha criticado el "abuso de poder de los jueces españoles".

Botran ha señalado que el Estado "usa estas herramientas judiciales" mientras también "permite manifestaciones de la extrema derecha ante la delegación de la Generalitat en Madrid o permite que el rey emérito, con todas las evidencias de corrupción, pueda huir a otro país".

Ha criticado que se pueda considerar "partidista" la pancarta, en favor de los políticos presos, y también que se pueda pedir la inhabilitación por mantenerla colgada en el balcón.

Críticas a Torra

El líder de Cs en Catalunya, Carlos Carrizosa, ha reivindicado este jueves que todo el mundo tiene que obedecer las leyes, y especialmente -dice- Quim Torra, "siendo presidente de la Generalitat", en referencia a la pancarta por la libertad de los presos del 1-O que mantuvo colgada en la fachada del Palau de la Generalitat en campaña electoral pese a la orden de la Junta Electoral Central (JEC) para que la retirara.

"Pues sí: aprovechaste un edificio público para hacer propaganda separatista en período electoral", ha dicho Carrizosa en un apunte en Twitter.

Lo ha hecho en respuesta al 'tuit' de Torra de este jueves, en el que junto con una foto de la pancarta ha escrito "Pues sí: libertad presos políticos y exiliados", el mismo día en que se produce su vista en el Tribunal Supremo (TS) por este hecho y por el que podría ser inhabilitado. 

Òmnium pide al Supremo que deje de hacer "el ridículo internacional"

El vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, ha pedido este jueves al Tribunal Suprem que deje de hacer el "ridículo internacional" y de "menospreciar la justicia" y "aplique justicia" no condenando al president de la Generalitat, Quim Torra, por una cuestión "inédita". 

Desde Madrid, poco antes de que comience la vista del Supremo, Mauri ha añadido que en ningún lugar del mundo se inhabilita a un presidente por una pancarta pidiendo la libertad de los presos políticos y la libertad de expresión. 

"No normalizaremos nunca esta represión y que se pueda inhabilitar a presidentes en ejercicio de su cargo por defender la libertad de expresión. Hoy estamos aquí como siempre al lado de la gente que sufre represión", ha añadido.

Rufián: "Hoy es una jornada de vergüenza para el Estado"

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha llamado a aparcar los reproches entre soberanistas y a "reforzar las instituciones" ante una probable inhabilitación del presidente de la Generalitat, Quim Torra, por parte del Tribunal Supremo.

"En democracia solo hay un mecanismo para reforzar las instituciones", ha asegurado el republicano, que ha evitado hablar de elecciones anticipadas.

Rufián se ha expresado en estos términos en declaraciones a los medios ante el Tribunal Supremo, que este jueves celebra una vista para revisar la condena a inhabilitación por desobediencia contra Torra por no haber descolgado a tiempo una pancarta a favor de los "presos y exiliados" en período electoral.

Para Rufián, la de hoy es una jornada "de vergüenza" para el Estado, que, en su opinión, "atenta" contra la libertad de expresión al encausar a Torra "simplemente por una pancarta".

El portavoz de ERC en el Congreso cree que "se puede intuir" que el Supremo confirmará la inhabilitación de Torra y, por ese motivo, pide al soberanismo catalán "unidad estratégica" para consensuar una respuesta que permita "reforzar las instituciones" catalanas.

"Frente al futuro, tenemos que dejar de mirarnos entre nosotros, de reproches y tenemos que reforzar las instituciones", ha concluido Rufián, que ha llamado al conjunto del soberanismo a no mirar al pasado y a "intentar imaginar escenarios para lo que viene".

Calvo cree que si es inhabilitado no podrá sentarse en la mesa de diálogo

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha ratificado la voluntad del Ejecutivo de reanudar la mesa de diálogo catalana, pero ha apuntado que si el presidente de la Generalitat, Quim Torra, fuera inhabilitado por el Tribunal Supremo, no podría sentarse junto al presidente Pedro Sánchez.

"Esa mesa se formó con presencia de los dos presidentes, y en esa condición solo se podrá sentar quien lo sea y no esté inhabilitado; es de carácter elemental", ha apuntado este jueves Calvo en una entrevista con TVE.

Ha dejado claro que si la mesa no se ha convocado ya ello no obedece a que el Gobierno haya puesto obstáculos.

"Por nosotros no ha sido", ha remarcado tras recordar que ERC se ha mostrado dispuesta "constantemente" a recuperar su trabajos y que por parte del Ejecutivo "no hay problema" en que se convoque en cuanto "tengan hueco" los dos partidos del Govern de la Generalitat.

Carmen Calvo ha preferido "no adelantar acontecimientos" respecto a una posible inhabilitación de Quim Torra si el Supremo confirma que cometió un delito de desobediencia.

Pero sí ha explicado que, una vez que se pronuncie, "todos, absolutamente todos", tanto los cargos públicos, las instituciones como los ciudadanos saben "que nuestro lugar es el cumplimiento de las normas".

En este sentido, la vicepresidenta primera no augura un escenario de conflicto popular en Cataluña si se consuma la inhabilitación de Torra.

Su argumento es que ahora la sociedad catalana está "temerosa y en muchas cosas cansada" por todo lo que está ocurriendo con la pandemia, y sus ciudadanos saben que el día a día "no se resuelve con teorías ni con posicionamientos ideológicos y políticos" sino "con respuestas".

Piensa que el independentismo ha creado en Cataluña "cierta sensación de fiasco, de mentira, de que algo iba a ocurrir pero no ocurre, porque no puede ocurrir en una democracia" y por este motivo "es hora" de que en la mesa de diálogo se aborden "los temas reales" que afectan a Cataluña.

En todo caso, ha advertido de que la "única salida" pasa por "la capacidad de encontrar acuerdos en el marco de la Constitución" y que el "adversario político" tiene que ser "reconocible" y al tratarse de la "única salida posible" es necesario "continuar" hablando en esa mesa.

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