Dicho plan director, diseñado por la empresa especializada Tecnigral S.L. tras ganar el contrato licitado a tal efecto por el Ayuntamiento, calcula que Sevilla capital cuenta con aproximadamente 300.000 árboles censados o no censados, toda vez que su cobertura arbórea abarca cerca de un 20 por ciento del total de la trama urbana. En ese contexto, el documento fija el "reto" de elevar la cobertura foliar del 20 al 25 por ciento en un periodo de 20 años, según exponía en la presentación del plan Laura Mendiburu, en nombre de la empresa redactora del texto.

Además, y entre otros muchos aspectos, el plan determina que los naranjos constituyen el 24,7 por ciento del total de los árboles de la ciudad, proponiendo el fomento de especies alternativas para reducir el peso del naranjo en la masa total arbórea, dada la recomendación de que ninguna especie abarque mucho más del diez por ciento del total de árboles de una ciudad y las plagas que amenazan a los críticos.

La, propuesta, así, es reducir el peso porcentual de los naranjos en la masa total arbórea de la ciudad, incorporando otras especies a la hora de rellenar los alcorques vacíos, las campañas de plantación, la reposición de arbolado o la creación de nuevos desarrollos urbanos con el consiguiente cultivo de ejemplares, entre otros aspectos.

HABLAN LOS ECOLOGISTAS

Frente a ello, la presidenta de la Red Sevilla por el Clima, María Perianes, licenciada en Ciencias Ambientales y miembro de un grupo de investigación de la Universidad Pablo de Olavide (UPO), manifestaba a Europa Press que el Plan Director del Arbolado contiene un "profundo diagnóstico" del arbolado de Sevilla, pero a su entender "se echa en falta un enfoque" que vaya más allá de la perspectiva de la arboricultura, es decir una mirada que incluya aspectos "desde la ecología, la arquitectura o el paisajismo".

Además, precisaba que aunque el Plan Director del Arbolado fije el objetivo de que la cobertura arbórea de la ciudad crezca del 20 al 25 por ciento en un plazo aproximado de 20 años, tal reto no está "sustentado con un análisis desde la perspectiva de la lucha contra el cambio climático o la regulación del clima local", por ejemplo.

Del mismo modo, alertaba de que los "criterios generales" según los cuales una tala de árboles quedaría justificada introducen supuestos "demasiado abiertos" por ejemplo en los casos de "conflicto con la obra civil", lo que le llevaba a reclamar una mayor "concreción" en tal extremo, demandando en paralelo "subsanar" la "pobre" información y los "errores" del inventario de arbolado publicado junto al plan.

La asamblea local de Ecologistas en Acción, de su lado, reclamaba al Ayuntamiento que aclarase "si el documento presentado es el definitivo o un borrador abierto a aportaciones de la ciudadanía, entidades y especialistas", solicitando en cualquier caso que el plan fuese colgado "por completo" en la página web municipal y fuese posible su descarga, así como "un amplio y bien informado periodo de exposición pública para que quien lo desee pueda presentar las observaciones, sugerencias y alegaciones que desee".