La policía ha explicado en un comunicado este jueves que le detuvieron el domingo por un presunto delito contra la seguridad viaria, y que su tasa de alcoholemia era legalmente punible.

El hombre conducía un camión de más de 40.000 kilos, e hizo la prueba de alcoholemia dos veces: en la primera, dio 1,30 miligramos por litro de aire expirado, y en la segunda 1,23 miligramos; mientras que el máximo legal para camioneros es de 0,15 miligramos.

Sobre las 21.00 horas del domingo, unos vecinos avisaron a los Mossos de que un camionero, "con síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos de las bebidas alcohólicas", salía de Llers (Girona) y conducía por la autopista AP-7 en dirección a Francia.

Una patrulla de tráfico le paró a la altura de La Jonquera, y después de hacerle la prueba de alcoholemia le detuvieron e inmovilizaron el vehículo.