La costumbre en Málaga es que se conecte el último viernes de noviembre, que este año cae en 28. De modo que habrá 40 días de alumbrado, dos días más que en 2007, tres más que en 2006 y cuatro más que en 2005.

La teniente de alcalde de Sostenibilidad y Servicios, Teresa Porras, explicó que aún así se ahorrará un 15% de consumo eléctrico y se dejarán de emitir 47,7 toneladas de CO2. Esto será posible porque se instalarán 477.268 watios menos que la pasada Navidad gracias a la introducción de las lámparas led de 0,1 watios y a que se han eliminado las de 15 y 25 watios, más derrochonas.

En 2007 ya se redujo el gasto un 25% porque, por primera vez, se colocaron lámparas de bajo consumo. En el ahorro también tuvo que ver que se decidió recortar las horas de encendido.

Este año se repetirá el mismo intervalo: desde las 18.30 y hasta las 00.00 horas de domingo a jueves, mientras que los fines de semana se dejarán conectadas hasta las 2.00.

 Ni rastro de la "crisis"

La crisis apenas se notará en el alumbrado navideño. Porras, al menos, sólo se refirió a ella para afirmar que se había eliminado un árbol de pascueros de Molina Lario porque es "caro" y "se estropea con el Levante", y que la factura eléctrica se abarata al instalarse menos potencia.

Habrá 3,7 millones de bombillas y entre las novedades, un árbol de 30 m en la plaza de la Constitución y un meteorito gigante en la de Uncibay.

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