Según ha informado la Delegación del Gobierno en Baleares, los últimos tres migrantes irregulares fueron localizados hacia las 23.00 horas de este lunes.

La embarcación fue encontrada en Cala Martina, en el municipio de Santa Eulària. Además, varios migrantes fueron vistos introduciéndose en la zona boscosa que hay en la zona en dirección a Es Canar.

En las labores de búsqueda también se movilizó el helicóptero de la Guardia Civil. Inicialmente, se detuvo a cuatro personas.

Cabe recordar que la pasada semana otras dos embarcaciones llegaron a Mallorca, las primeras que lo hicieron tras la crisis del coronavirus.

Recientemente, en declaraciones a Europa Press, el director insular de la Administración General del Estado, Enrique Sánchez, reconoció dudar de que la crisis por el coronavirus "sea un argumento más fuerte que la desesperación" que lleva a los migrantes "a jugarse la vida para poder vivir" y a viajar en patera hasta las costas españolas.

Así, el pasado 12 de junio Sánchez se reunió con responsables de Policía Nacional, de Guardia Civil, del Consell de Ibiza o del Área de Salud pitiusa, para "abrir canales de comunicación y protocolos de coordinación para incluir en ellos un seguimiento del COVID-19, en caso de que llegaran migrantes contagiados con el virus".

Básicamente se ajustará el protocolo de triaje sanitario ya existente y que lleva a cabo Cruz Roja e introducir controles de coronavirus para personas que alcanzan en pateras las costas pitiusas, informó el director insular.

En 2019, las Pitiusas registraron la llegada de 24 pateras con 320 ocupantes irregulares. La mayoría eran hombres jóvenes de origen argelino y más de 40 eran menores de edad.