El pasado 15 de enero el coronavirus ya estaba presente en las aguas residuales de Barcelona, esto supone unos 40 días antes del primer caso declarado, el 25 de febrero. Es la conclusión de un estudio llevado a cabo por la Universitat de Barcelona y Aigües de Barcelona.

Así lo ha anunciado Albert Bosch, presidente de la Sociedad Española de Virología (SEV) y catedrático del Departamento de Microbiología de la UB, en el programa Vía Lliure de Rac 1.

Bosch ha explicado que han examinado muestras antiguas para detectar el virus y lo han localizado por primera el 15 de enero, mientras que en las de diciembre no estaba presente.

El presidente de la SEV ha asegurado que el sistema empleado permite "anticipar mucho la presencia del virus en la población" y, aunque no es una "tarea sencilla", deja un margen para actuar de manera "inmediata".

En cuanto a la situación actual, ha expuesto que a la entrada de las depuradoras de aguas residuales han perdido la señal, lo que denota que "el virus va a la baja". "Pero si miramos los grandes colectores de los barrios de Barcelona, ahí todavía lo encontramos", ha dicho, por lo que llama a no bajar la guardia.