El escritor y periodista Manu Leguineche recibió este martes el Premio Euskadi de Literatura por su libro El Club de los faltos de cariño. Da respuestas entre la lucidez y el desvarío, así como hablan los irónicos.

¿Acaso es miembro de ese club de los faltos de cariño?

Pues sí. Me he sentido arrojado a la vida, sin nada de cariño... (ríe socarronamente). Bueno, es broma. Son estas depresiones que le persiguen a uno en algunas fases de la vida y por eso lo he escrito.

Entonces, ¿cómo es su libro?

Una reflexión entre el pasado y el presente. Pero no sólo mi pasado, que es la guerra;si no una reflexión de la vida.

El jurado dice que usted tiene ansia de saber... Tras patearse el mundo, ¿Qué quiere descubrir?

No conviene contar lo que he visto porque parecería chulería. Para mí lo importante es lo que me queda por ver.

En un año le han dado tres premios... ¿Cómo está?

Es exagerado a todas luces. Merezco alguno pero no tantos (ríe). El premio que más ansío es el del concurso de bacalao, que cocinándolo no me gana nadie y nunca me lo han reconocido.

Es ya un referente del periodismo, la literatura... ¿Algún consejo a los jóvenes que quieren emularle?

No soy un referente. Me dicen: «¡Maestro!», y yo digo: «Maestro es Antoñete». El único consejo bueno que puedo dar a un joven es que lea muchos periódicos y libros. Aunque no le guste, es la única manera.

¿Hay que vivir intensamente para escribir buenos libros?

Es necesario tener experiencias, pero no hace falta ir fuera. Antes era más fácil ir a cubrir una guerra, ahora ya no.

¿Y eso por qué?

Está de moda. Un compañero decía:«En Kosovo hay 4.000 periodistas. Más que en el Tour». Ja, ja, ja.

Bio

Nacido en Arratzu, en 1941. Ha sido corresponsal de guerra y fundador de las agencias de noticias Colpisa y Fax Press.

El escritor Pello Añorga ha obtenido el Premio Euskadi de Literatura en literatura juvenil por 'Jenio Gaiztoa' .

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