Ruletas, bingos, apuestas, loterías, quinielas o primitivas. ¿Quién no ha jugado alguna vez? El problema surge cuando se pierde el control, cuando no hay límites.
Con motivo del Día Internacional sin Juegos de Azar, que se celebra hoy, la Asociación Sevillana de Jugadores de Azar en Rehabilitación recuerda que en la provincia hay un 2,1% de sevillanos que son jugadores patológicos, según los últimos datos que manejan. De las personas que entran en tratamiento para dejarlo, entre un 65% y un 70% se rehabilita totalmente en dos años.
Las estadísticas de la Consejería de Gobernación del 2007 indican que desde el año 2003 el volumen de juego ha crecido en Sevilla casi un 40%. En 2007, los sevillanos gastaron 575 millones de euros en juegos, con un gasto real medio por persona de 311 euros.
La crisis se nota
La situación está agravándose este año por la crisis económica, que está haciendo estragos entre los jugadores. La Federación Andaluza de Jugadores en Rehabilitación (Fajer) asegura que cada vez llega más gente a pedir ayuda: «Se está incrementando mucho el volumen de juego en los últimos meses. Empiezan a llegarnos jugadores que llevan menos tiempo, los primeros afectados por la crisis. Van a crecer sobre todo las loterías, cupones, primitivas y bonolotos», explica Juan Luis Suárez, presidente de Fajer.
A nivel regional, esta federación calcula que cada andaluz gasta unos 600 euros al año en juegos de azar. «En las personas que tenemos en tratamiento los hay que se apuestan desde su sueldo entero, 800 euros, hasta millones, según el poder adquisitivo», añade.
Las tradicionales
En lo que va de año ya se han admitido a trámite en los centros de la Junta a 263 personas para tratamiento por juego patológico en Andalucía. Bienestar Social ha iniciado una nueva campaña de concienciación que incide en las familias.
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