El también presidente de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española, dijo antes de inaugurar una nueva Casa de la Espiritualidad en esta capital, que se trata de una necesidad en un momento de crisis que no sólo está afectando al colectivo de los inmigrantes, sino también a muchas familias españolas.

Sánchez ha alertado sobre el incremento de parados y pobres, no sólo extranjeros, sino, también nacionales que hasta ahora "se han desenvuelto bien" pero que han comenzado a vivir situaciones "muy apretadas" y necesitan ayuda; de ahí que estén pensando en ampliar los servicios de comedores de Cáritas.

El nuevo comedor estaría ubicado en las inmediaciones de la Casa Nazaret, donde están también otros muchos de los servicios que presta la Iglesia en la provincia y algunas ONG. Se trataría en principio de destinar una de las cuatro plantas de este aulario pensado para la realización de cursos de formación profesional y módulos y que estaría bajo la dirección de Cáritas.

Duplicado la demanda

Según Sánchez, se trata de una "emergencia" que además, a su juicio, no ha tocado fondo porque muchos de los parados aún cobran el paro, pero, se pregunta qué harán cuando se les acaben esas ayudas que perciben. En el último año -según el obispo seguntino- se ha duplicado la demanda del uso del comedor para personas necesitadas, y "se prevé que siga aumentando".

De hecho, el párroco de la concatedral, Agustín Bujeda, ha advertido de que ayer llegaron a esta parroquia media docena de familias a pedir ayuda y trabajo.

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