Treves, auxiliar de Citroën, prevé cerrar antes de diciembre

  • Lo ha anunciado CC.OO.
  • La medida está relacionada con la política de deslocalización
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El sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.) alertó hoy de que la empresa Treves planea el cierre "antes del mes de diciembre" de uno de los dos centros que esta auxiliar de Citroen tiene en Pontevedra, concretamente el ubicado en la carretera de Vigo.

Según explicó el secretario comarcal de Comisiones Obreras, José Luis García Pedrosa, el fin de actividad de este centro fabril "no tiene que ver con la crisis que atraviesa Citröen", sino que está relacionado con la "deslocalización" que Treves ha llevado a cabo en los últimos años con la apertura de dos nuevos centros de producción, Trekoa, en Oporto; y Treroc, en Marruecos.

Estas dos fábricas realizan el mismo trabajo que en Pontevedra pero "en unas condiciones más competitivas", por lo que García Pedrosa explicó que "la dirección de la empresa ha desviado su producción a estos dos puntos".

El sindicato añadió que el contrato de alquiler del local que actualmente ocupa esta multinacional en la carretera de Vigo vence en el mes de diciembre y, según los datos que maneja el sindicato, "no va a ser renovado".

Además, García Pedrosa informó de que Comisiones acaba de denunciar a Treves ante Inspección de Traballo por el despido de veinte operarias, al considerar que ésta es una práctica ilegal por sobrepasar el diez por ciento de la plantilla, una circunstancia que vulnera el estatuto de los trabajadores.

Movilizaciones  

Comisiones, que carece de representantes en el comité de empresa de Treves, no descarta iniciar una campaña de movilizaciones para intentar "revertir" esta situación, y al tiempo, hace un llamamiento a la plantilla de trabajadoras para que desconfíen de la CIG y defiendan sus puestos de trabajo.

Finalmente, Comisiones Obreras denunció que la compañía acaparó subvenciones directas a fondo perdido y otros trasvases de financiación pública por los conceptos de empleo, formación, investigación y desarrollo (I+D) e incentivos regionales, que según explicó en el año 2001 el conselleiro de Economía, Xosé Antón Orza, alcanzaron los quinientos millones de pesetas.

Esta firma, dedicada a la fabricación de componentes del automóvil, abrió su primer centro en la Avenida de Vigo en octubre de 1999 con diez operarios. Tres años más tarde, la plantilla de este centro superaba las 260 mujeres, aunque a día de hoy tan sólo trabajan cien.

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